14 Empresas latinas se visten de verde rumbo a la transición energética

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Quizás como pocas regiones, los países de América Latina, están siendo afectados por los efectos […]

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Quizás como pocas regiones, los países de América Latina, están siendo afectados por los efectos del cambio climático. De hecho, desde Centroamérica hasta la patagonia, la zona está considerada como una de las más vulnerables a causa del calentamiento global.

En general, los países de esta región enfrentan cuatro fenómenos climáticos que significan un reto; las sequías, inundaciones, huracanes y el incremento de los niveles del mar, convinan la tormenta climática perfecta para la zona. Cada uno de ellos, representa por sí mismo un desafío distinto para cada nación.

La región es considerada la más rica en biodiversidad, además de contar con una de las reservas de agua dulce más grande del planeta. Sin embargo, también se enfrenta a escenarios climatológicos extremos, pues mientras en algunos países las sequías y descongelamiento de los glaciares agobian a una buena parte de sus poblaciones, en otras zonas, las inundaciones y el impacto de los huracanes inundan las tierras de cultivo.

América Latina y el Caribe, están consideradas como el granero del mundo por los volumenes de comida que producen y exportan a casi todos los países del mundo. Por lo que un aumento de las afectaciones climáticas en la producción de alimentos en los países de la zona, podrían generar una fuerte vunerabilidad alimentaria en gran parte del planeta.

No sólo eso, acausa de los impactos climáticos, toda América Latina es considerada también, como una de las zonas con mayor migración tanto interna, como quienes buscan llegar a otros países, especialmente a los Estados Unidos. Pero aunque este fenómeno centraliza su foco sólo en Centroamérica, en países como Colombia, Perú, Ecuador, Bolivia y Chile, reportan grandes volúmenes de migrantes que se mueven intra y entre países.

De acuerdo con datos del portal de migración de América del Sur, tan sólo en 2019, se desplazaron en esa región más de 28 millones de personas, principalmente de Venezuela, Argentina, Colombia, Chile, Brasil y Perú. Para 2020 los datos son totalmente opuestos debido a las restricciones de movimiento entre países y al confinamiento.

Pese al panorama complejo que enfreta América Latina como consecuencia del cambio climático, la mayoría de los países de la zona, han ratificado su adhesión a los acuerdos de Paris.

En este sentido, los países de la región, ya trabajan bajo la iniciativa regional “Energía Renovable en América Latina y el Caribe” (RELAC) con la que se pretende alcanzar una meta regional de al menos un 70 por ciento de participación de energía renovable en la capacidad de generación de electricidad para el año 2030.

Por el momento, la principal fuente de energía renovable en la región es  através de las hidroeléctricas que participan con el 50 por ciento de energía generada con fuentes renovables; detrás, vienen las fuentes eólicas y solar. Pero América Latina, tiene además del litio, un As bajo la manga del que poco se ha hablado hasta el momento. El hidrógeno verde.

De acuerdo con diversos estudios, América Latina tiene un enorme potencial para producir hidrógeno verde que sirve como insumo para generar electricidad. De acuerdo con la Cepal, se estima que se podría llegar a cubrir la matriz energética de la región invirtiéndo únicamente el 1.33 por ciento del PIB nacional de cada país impulsando ésta tecnología y otras fuentes renovables. Esto otorgaría una ventaja competitiva para la zona además de generar inversiones y más de 7 millones de empleos y por supuesto, disminuir sus emisiones de carbono.

Impulsar éste tipo de proyectos además, permite el trabajo coordinado entre naciones para impulsar el desarrollo regional, como sucede con el programa de Conexión de México con el Sistema de Interconexión Eléctrica de los países de América Central (SIEPAC) así como el Gasoducto entre México y los países del norte de Centroamérica que coordina la Cepal y al que se le han otorgado apoyos por 2,200 millones de dólares.

Las empresas y el sector privado, también está haciendo su parte y poco a poco comienza a profundizar en la adaptación de los lineamientos del Desarrollo Sustentable de la ONU, pues debemos recordar que el trabajo que se realice desde la empresas para impulsar una economía circular que permita el tránsito hacia un mundo más equilibrado y comprometido con el medio ambiente será fundamental para alcanzar las metas de mitigación de emisiones.

De esta forma, presentmos el primer listado de 14 empresas latinoaméricanas que están trabajando bajo los lineamientos del desarrollo sustentable y están adquiriendo compromisos corporativos en sus procesos internos que les ayuden a conseguir sus compromisos de disminuir su impacto ambiental.