África podría salvar energéticamente a Europa
Escrito por verdes |
En un momento en el que la mayoría de los países europeos está sufriendo una […]
En un momento en el que la mayoría de los países europeos está sufriendo una de sus crisis energéticas más graves, provocada principalmente por el conflicto armado en Ucrania, algunas de las grandes compañías petroleras, como la estatal italiana Ente Nationale Idrocarburi (ENI), han volteado hacia África para garantizar el abastecimiento de hidrocarburos de Europa.
Claudio Descalzi, director ejecutivo de la petrolera, manifestó recientemente que, en lugar de pensar en Estados Unidos como el gran proveedor de gas, se debería fortalecer las inversiones en África, para crear un nuevo eje sur-norte que conecte sus vastos recursos fósiles y renovables con los hambrientos mercados europeos.
Y es que, mientras la mayoría de los países de la región se confiaron y dejaron casi la totalidad de su abasto de energía a Rusia, sitios como Italia, a través de ENI, siguieron invirtiendo recursos en otras zonas del mundo, como fue el caso del continente africano, para hacerse de grandes cantidades de petróleo y gas.
Hay que recordar que, desde 1954, ENI opera en África, donde tiene presencia en 14 países. Además, ha seguido invirtiendo mientras varios de sus rivales estadounidenses y europeos han reducido su participación en esta zona del mundo para crecer en otros sitios.
En abril de 2022, la compañía obtuvo la aprobación de Argelia para aumentar el gas que exporta por gasoducto a Italia. Así, de 9,000 millones de metros cúbicos anuales pasará a 15,000 millones en 2023 y a 18,000 millones en 2024.
El mismo mes, la empresa firmó un acuerdo para exportar 3,000 millones de metros cúbicos de gas natural licuado de Egipto a Europa para el año 2022.
El 9 de enero de 2023, tras seis meses de una licitación fast track, la compañía anunció el inicio de la producción de dos yacimientos de gas en la región argelina de Berkine Sur, que contribuirán a satisfacer la demanda del mercado europeo.
En septiembre pasado, la empresa italiana también anunció la compra de los activos que tenía en Argelia la compañía petrolera británica BP, con lo que podrá explotar los recursos de los depósitos In amenas e In Salah, en el sur del país magrebí.
Actualmente, el yacimiento de Berkine es operado por ENI y la empresa argelina de hidrocarburos Sonatrach. Se calcula que proporcionará 1 millón de metros cúbicos de gas cada día y unos 4,000 barriles diarios de combustibles líquidos. Para el final de año se espera que la producción aumente a alrededor de 2 millones de metros cúbicos de gas cada día.
Tras el gas licuado
En noviembre pasado, ENI anunció el primer cargamento de gas natural licuado (GNL) de la planta Coral Sul Flng de Mozambique, lo que sin duda es una buena noticia para el mercado europeo.
Coral Sul es operada por ENI, pero también están asociadas las empresas ExxonMobil, CNPC, GALP, KOGAS y ENH. Está ubicada en la cuenca del río Rovuma, que incluye la primera planta flotante de licuefacción de gas natural en África, en cuya construcción se han invertido 10,000 millones de dólares. El proyecto tiene una capacidad de licuefacción de gas de 3.4 millones de toneladas al año y fue aprobado en 2017.
La empresa italiana aseguró que esta planta entró en funcionamiento en tiempo récord tras sólo cinco años de planeación, de acuerdo con el calendario y los costes previstos en el programa inicial, y a pesar de las interrupciones causadas por la pandemia de Covid-19.
Cabe señalar que, a pesar de los esfuerzos que se realizan en África, la producción de gas a nivel mundial sigue siendo modesta, debido a que sus reservas sólo representan el 7.2 por ciento del total producido.
