El amoníaco verde como alternativa a la descarbonización
Escrito por Manuel Pineda Curiel |
El amoníaco renovable, conocido también como amoníaco verde, es un combustible sintético neutro en carbono […]
El amoníaco renovable, conocido también como amoníaco verde, es un combustible sintético neutro en carbono producido a partir de hidrógeno de origen biogénico o mediante la electrólisis del agua utilizando energía renovable. Este compuesto químico, formado por nitrógeno e hidrógeno (NH₃), no contiene carbono en su molécula, lo que lo convierte en una alternativa prometedora para la descarbonización de diversos sectores industriales, especialmente aquellos que son intensivos en energía y emisiones de gases de efecto invernadero.
Su uso como combustible sustentable es particularmente relevante en el transporte marítimo y como medio de almacenamiento y transporte de hidrógeno renovable, debido a su mayor densidad energética por volumen en comparación con el hidrógeno puro, lo que facilita su manejo y reduce los costos asociados.
El futuro del amoníaco renovable como combustible sustentable es prometedor. Se estima que para 2030, una parte significativa de la producción de amoníaco podría ser verde, representando del 12 al 38 por ciento de la producción total, y esta cifra podría aumentar a entre el 69 y el 94 por ciento para 2050. Estas proyecciones se apoyan en la creciente necesidad de fuentes de energía limpias y en la eficiencia de las tecnologías de producción de amoníaco renovable. Además, se espera que el costo del amoníaco renovable disminuya sustancialmente, lo que podría hacerlo competitivo con otros combustibles y acelerar su adopción.
Participación activa
Varias empresas e instituciones están trabajando activamente en el desarrollo y la promoción del amoníaco renovable. La Asociación Española del Amoniaco Renovable (AEAR) es una entidad destacada en este campo, promoviendo la producción, comercialización y uso responsable del amoníaco renovable y apoyando una economía energética sostenible.
Empresas como EDP y el Grupo Térvalis están colaborando en proyectos para la producción de amoníaco renovable, con el objetivo de descarbonizar el sector de los fertilizantes en Europa y fomentar una transición energética justa. Además, compañías como Wärtsilä y Maersk están explorando el uso del amoníaco como combustible marino, lo que podría transformar la industria naviera hacia prácticas más sostenibles.
Los expertos coinciden en que el amoníaco renovable juega un papel crucial en la sostenibilidad global. Su producción limpia, la capacidad de almacenar y transportar energía de fuentes renovables y su potencial para reducir las emisiones en sectores que actualmente utilizan amoníaco convencional son aspectos clave que respaldan su relevancia en la transición energética. La AEAR y otras organizaciones similares están organizando eventos y jornadas para discutir y promover el conocimiento sobre el amoníaco renovable, su tecnología de producción, transporte, utilización y su papel en la descarbonización de la economía.