El hidrógeno quiere sustituir al gas natural

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Escrito por verdes |

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Un proceso químico con vapor a alta temperatura podría hacer posible que el hidrógeno sustituya al gas natural, debido a que en su mayoría se compone de metano.

El hidrógeno es uno de los elementos más abundantes del planeta, este se encuentra en gran medida en el agua, dos partículas de hidrógeno y una de agua forman el H2O. Sin embargo, este también se puede obtener del gas natural utilizado como combustible, este se compone en su mayoría de metano (CH4).

Para lograr convertir el metano en hidrógeno se requiere un proceso químico con vapor a alta temperatura. Actualmente, el 96 por ciento del hidrógeno a nivel mundial es conseguido mediante combustibles fósiles, como el gas y el carbón. De dicha cantidad, el 72 por ciento, aproximadamente, se destina a la industria petroquímica, el resto se utiliza en metalurgia, electrónica y propulsión de vehículos espaciales.

Usar el hidrógeno como combustible resulta beneficioso para el medio ambiente, pues no genera emisiones de gases de efecto invernadero. No obstante, no es tan sencillo como pareciera por varios motivos.

En primera instancia está el hecho de que para producirlo se requiere del consumo de energía, la cual, en su mayoría, proviene de fuentes no renovables, sumado a que la adquisición de gas o de carbón ya libera grandes cantidades de dióxido de carbono (CO2) a la atmósfera.

También hay que tener en consideración que su uso añadirá mucho más hidrógeno a la atmósfera y esto puede tener un efecto contraproducente en la lucha contra el cambio climático. Su presencia origina un cambio en el hidroxilo, químico formado por un átomo de hidrógeno y uno de oxígeno, este se encarga de eliminar el metano. De acuerdo con varios investigadores, en cien años el calentamiento producido por el hidrógeno puede ser cinco veces mayor que el derivado por las emisiones de CO2.

Pese a todas estas dificultades, la empresa coreana, LG Chem, construirá su primera planta de hidrógeno puro en el país. La instalación será a 75 kilómetros al suroeste de Seúl, la obra dará inicio durante el primer semestre de 2023 y se espera que para el segundo trimestre de 2024 ya cuente con una capacidad de 50 mil toneladas.

Se conoce como craqueo al proceso químico en el cual se separan compuestos químicos. Este será el método de la central para obtener hidrógeno a partir de metano, y su resultado será empleado como combustible para la extracción de materias primas petroquímicas básicas, según la compañía.

Desde hace muchos años el hidrógeno ha sido empleado como combustible y por ello existe una clasificación por colores, dependiendo del nivel de contaminación que emitan se posiciona en uno o en otro. 

Primero se encuentra el verde, este no genera gases de efecto invernadero, ni en su producción ni en su utilización. Sin embargo, es el menos popular por su alto costo, ya que la electrólisis, método para conseguir el hidrógeno del agua, requiere grandes cantidades de energía que deben ser obtenidas de fuentes renovables.

El segundo y el más utilizado a nivel internacional, este es el gris. También es el más contaminante de todos, dado que proviene de la quema de combustibles fósiles como el carbón y el gas natural. Pero resulta ser el más barato.

Finalmente está el azul. Se puede considerar como un punto medio entre el verde y el gris. Este se produce a partir del gas natural, pero con la diferencia que se captura el CO2 para evitar que llegue a la atmósfera. Dichos residuos son resguardados en pozos geológicos o vendidos a otras industrias como la alimentaria, aunque no tiene mucho éxito esto.

Sin lugar a dudas, el hidrógeno se posiciona como una buena alternativa para generar energía. Su combustión solamente deja agua, además, se puede acumular y distribuir en los tanques y gasoductos del gas natural. Aunque, también tiene sus riesgos inmediatos y a largo plazo.