¿Es posible sustituir al glifosfato?
Escrito por verdes |
La agricultura ecológica muestra cada día, que es la mejor opción para proteger la salud humana y el medio ambiente.
Existe un amplio debate sobre el impacto del glifosfato en la salud de la población y la de los ecosistemas. Un tribunal de Estados Unidos (EU), condenó a Monsanto y a su filial Bayer, por diversas demandas (acumula 18 mil) por la relación del glifosfato con el cáncer. La revista científica Science Direct en su edición de 2019 publicó los resultados de un estudio que asegura que la exposición al glifosfato aumenta un 41 por ciento las posibilidades de desarrollar el linfoma de Hodgkin (cáncer linfático).
Pese a estar clasificado por la Agencia Internacional del Cáncer de la Organización Mundial de la Salud como “probablemente cancerígeno para los seres humanos” desde 2015, el glifosfato es uno de los pesticidas más usados en todo el mundo. Para 2016, el Instituto Medioambiental de Munich trabajó en una investigación en la que descubrió residuos de glifosfato en 14 marcas de cerveza alemanas. En EU, otro análisis comprobó la presencia del pesticida en “casi todas las bebidas para adultos”. Y otro estudio del Enviroment Working Group encontró la sustancia en cereales consumidos por niños.
Luego de años de debate, aún no existe unanimidad científica, sin embargo, países como Francia han intentado prohibir al glifosfato, pero la complejidad de llevarlo a la práctica se escuda en la falta de alternativas, pues los agricultores, aseguran que es necesario para los sistemas agrícolas.
Las organizaciones, WWF España, la Sociedad Española de Agricultura Ecológica y la Asociación de Apicultores de Tenerife, le exigen a la Unión Europea (UE) que, ante la falta de investigaciones definitivas, aplique el principio de prevención. Greenpeace a denunciado que la industria química, a través de sus agresivas campañas de marketing, ha querido convencer a la opinión pública, que no es posible mantener la agricultura sin recurrir a fertilizantes y plaguicidas sintéticos.
Mientras que la agricultura ecológica muestra cada día, que es la mejor opción para proteger la salud humana y el medio ambiente. Las técnicas que sugieren organizaciones pro ambientales para una agricultura ecológica sostenible, son el pastoreo, la eliminación de hierbas manual o mecánicamente, el incremento de la diversidad de cultivos y su rotación.
A menudo la ley y los análisis de la contaminación por químicos evoluciona lentamente, por ello el Ministerio de Agricultura insiste en la importancia de “garantizar que la evaluación científica de los plaguicidas sometidos a aprobación reglamentaria en la UE se base exclusivamente en estudios publicados y encargados por las autoridades públicas competentes, y no por la industria agroquímica”. En resumen, el debate continúa abierto y por el momento, es difícil establecer la viabilidad de la sustitución del glifosfato de forma eficiente y productiva.