Grandes ciudades implementan transportes masivos para mejorar la calidad del aire

Las grandes ciudades en el mundo crecen cada vez más y demandan el desarrollo de soluciones sostenibles en temas como energía, infraestructura y movilidad. De acuerdo a estimaciones de Naciones Unidas, para 2050, cerca del 70 por ciento de la población en el planeta vivirá en zonas urbanas, obligando a las autoridades a prepararse para implementar estrategias que faciliten la circulación de toda la gente.

El Presidente de la Asociación Mexicana de Transporte y Movilidad (AMTM), indica que los habitantes de la Ciudad de México pasan entre 3.6 y 3.7 años de sus vidas, a bordo de algún transporte.

En la actualidad existen complejos sistemas de servicios públicos que incluyen metros, autobuses, autopistas o sistemas férreos avanzados, entre otros, que son alternativas de tránsito que le permiten a los ciudadanos un flujo dinámico.

La mayor parte de la movilidad depende de herramientas vinculadas con Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (TIC).  Estas soluciones no sólo permiten que las urbes y sus habitantes interactúen de una forma sustentable, también tienen un impacto medioambiental.

Por ejemplo, si se habla de automatización de sistemas férreos, Arabia Saudita tiene el mayor proyecto urbano del mundo. En el metro de Riyadh se operan 74 trenes, todos sin conductor. Su eficiencia es tan grande que determina la velocidad a la que se pueden mover los trenes y sus tiempos de mantenimiento que mejoran la disponibilidad y garantizan la confiabilidad de las operaciones.

En Colombia, se implementó el Sistema Inteligente de Movilidad de Medellín (SIMM). Se trata de espacios donde se recibe toda la información de los sistemas que se han instalado en la ciudad y desde los cuales se analiza cómo se mueven las autopistas, en dónde hay alguna emergencia qué atender, dónde hay patrullas de apoyo o cuándo es preciso realizar modificaciones a la red de semáforos para agilizar el tránsito vehicular.

El Columbus, Ohio, se están utilizando los datos que recopilan de los automóviles de la flota gubernamental, como parte de un programa piloto de ciudades inteligentes, para mejorar también la sincronización de las señales de tráfico.

Otra ciudad que está mejorando su movilidad es Atlanta, Georgia, que tiene un corredor inteligente de 3,701 kilómetros y reduce los tiempos de viaje un 25 por ciento. Además, cuenta con tecnología de señal de tráfico y cámaras de video conectadas.

En la Ciudad de México, se instauró el Sistema de Transporte Público Cablebús, un teleférico que ofrece sus servicios en zonas altas de la capital. Y ha alcanzado una afluencia de hasta 56 mil usuarios diarios. Tiene 377 cabinas, cada una puede transportar a 10 personas, con un recorrido de 33 minutos y 20 segundos, y una velocidad de 21.6 kilómetros por hora. La línea 2 tiene el récord mundial como la línea de transporte público más larga del mundo. Cuenta con una longitud de 10.55 kilómetros y 305 cabinas. Se espera la conformación de una tercera línea. 

Cabe resaltar que los teleféricos y los transportes parecidos al metrobus, son un éxito en América Latina, pues este transporte existe como en La Paz, Medellín, Bogotá y Santo Domingo, aunque ya tienen algunos años de haberse implementado.

La movilidad masiva es un paso definitivo que las grandes ciudades deben dar para reducir no solamente la contaminación sino también para ofrecer opciones para mejorar el aire que respiran sus habitantes.