La caída del precio del petróleo podría anunciar el inicio de la recesión

Los mercados están considerando una inminente recesión a nivel mundial y los datos así lo determinan.

A principios de agosto el barril de West Texas Intermediate (WTI) alcanzó su mínimo histórico por debajo de los 90 dólares, esto como resultado de tasas de interés más elevadas y la sensación de que habrá una desaceleración económica global que amenaza la demanda. Este es el precio más bajo que alcanzado desde la desde el inicio de la guerra entre Rusia y Ucrania. 

Los contratos de futuros del petróleo WTI bajaron 12 dólares a principios de agosto en la Bolsa de Nueva York.

Está perdida se debió principalmente al aumento en los inventarios de las reservas de petróleo crudo en Estados Unidos, lo que significa una caída en las exportaciones y la reducción del trabajo de las refinerías, lo que hace pensar una baja en la demanda mundial.

La OPEP encabezada por Arabia Saudita y Rusia aumentaron solamente en 100,000 barriles diarios su suministro a los mercados para el mes de septiembre, una cuota muy por debajo de las expectativas proyectadas para este momento del año.

Los mercados están considerando una inminente recesión a nivel mundial y los datos así lo indican, pues recientemente Reino Unido subió su tasa de interés de 1.25 por ciento a 1.75, algo que no ocurría desde diciembre del 2008.

Para algunos, la duda se centra en el por qué la baja en el precio del petróleo no es proporcional al precio de la gasolina, y se debe a que el precio que paga el consumidor cuando carga gasolina paga alrededor de 50 por ciento en impuestos. Y este es uno de los motivos por lo que la gasolina no puede bajar al mismo nivel que el petróleo. 

La fuerte caída del precio del petróleo se han dado como consecuencia de las acciones que han tomado los países productores  por hacerse de divisas y superar sus problemas internos, pues invirtieron y comenzaron a producir a mayor velocidad que la demanda. Tal es el caso Rusia, Irán o Venezuela que requieren de un precio en torno a los 110 dólares por barril para mantener sus finanzas equilibradas y el ritmo de su producción, dado los costos que implica su extracción. 

Las espectativas de los mercados estiman que el precio del petróleo puede ir más abajo por lo que podría llegar a los 60 o 65 dólares por barril dado el estancamiento en el consumo que viven los mayores consumidores de petróleo del mundo, en este caso Europa y Estados Unidos, quienes demandan alrededor del 50 por ciento de la producción mundial.

De llegar a este escenario en la caída de los precios del petróleo, podrían resultar devastadores para los países productores, lo que los llevaría directamente a enfrentar la recesión que se avecina en el mundo con bajos precios de los energéticos.