La educación digital motor del cambio
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Por: Nidia Chávez, directora de Fundación Telefónica Movistar México La digitalización se aceleró inesperadamente durante […]
Por: Nidia Chávez, directora de Fundación Telefónica Movistar México
La digitalización se aceleró inesperadamente durante el último año y demostró un fenómeno que ya previmos: las competencias digitales son una necesidad permanente para la vida del hombre de este siglo en áreas económicas, sociales y para la educación desde hace varios años.
Es claro que el empleo de herramientas tecnológicas por parte de los docentes ha sido clave para desarrollar nuevos modelos de aprendizaje que optimizan los procesos propios de un salón de clases, ya sea en sistemas a distancia, presenciales o híbridos.
Estas competencias han servido para empoderar a los profesores. Según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), la inversión de México en educación aumentó de forma considerable entre 2000-2010
En México existe una brecha digital que afecta principalmente a las comunidades más alejadas, aquellas que carecen de conectividad y donde incluso la educación se realiza con modelos diferentes a los tradicionales. Para los docentes de este tipo de localidades ya representaba un reto incluir a las TIC en sus modelos educativos, ya sea por falta de conectividad en sus localidades o por una carencia de alfabetización informacional y digital.
En Fundación Telefónica Movistar México confiamos en nuestro ADN digital: la tecnología sin las personas en el centro de la revolución que vivimos hoy no tendría mucho sentido. Por eso, nuestro trabajo, se ha caracterizado por escuchar las necesidades reales de nuestros beneficiarios y de las instituciones con las que colaboramos.
Bajo esta perspectiva, impulsamos la educación digital como un motor de cambio. Lo hacemos a través nuestro programa Comprometidos con la educación, el proyecto de mayor alcance educativo que lideramos desde 5 años en 40 países del mundo. Gracias al modelo que lo respalda, hemos podido generar nuevas dinámicas educativas, democratizar el acceso a la tecnología y con ello reducir la brecha digital.
La crisis del covid 19 confirmó la pertinencia de nuestros objetivos y renovó nuestro compromiso: promover la educación digital de calidad como camino idóneo para un futuro con mejores oportunidades para todos. Así, frente a esta situación global, nos sentimos privilegiados de ser aliados de miles de docentes de 40 países del mundo que han visto en nosotros un socio para continuar el proceso de enseñanza-aprendizaje.
Sin duda, ha sido más imperativo que nunca continuar con esta escucha permanente y atenta. En 2021 tenemos la meta de beneficiar a más de 648,500 docentes, niñas y niños en comunidades vulnerables del país. Sólo así, al compartir un mismo objetivo, sumamos valor al cambio de la sociedad en la era digital.
