La industria papelera apuesta por la economía circular

Por: Martín Rincón, Director de Sustentabilidad de Bio Pappel

Durante las últimas décadas la industria del papel ha demostrado ser uno de los sectores con mayor consciencia ambiental. Prueba de ello es la implementación de tecnología y prácticas verdes dentro de sus procesos, permitiéndole reducir huella de carbono y, aún más importante, convertir del reciclaje de papel su principal fuente de materia prima. 

Asimismo, hace uso de fibras de bosques certificados por organismos internacionales como el Forest Stewardship Council (FSC®), que tiene como objetivo garantizar la reforestación y el uso correcto de los subproductos que se obtiene de éstos, por lo que, cuando se completa la cadena en la producción de papel, se cierra un círculo virtuoso a favor del planeta.

No obstante, hoy es común escuchar a las nuevas generaciones expresar que tienen desconfianza en utilizar cuadernos, envolturas y empaques de papel por temor a caer en un consumo poco responsable con el medioambiente. 

Esta loable actitud, donde ciudadanas y ciudadanos cuestionan las acciones de sustentabilidad que desarrollan las organizaciones y rechazan el desperdicio, es una buena señal de nuestros tiempos; sin embargo, en el caso de la industria de papel y en particular de los productos de Bio Pappel, el rechazo no está sustentado.

De hecho, ahí existe un amplio margen de oportunidad para educar y comunicar constantemente cómo puede identificarse el papel y el cartón reciclado, así como que los consumidores reconozcan con sus compras a empresas verdaderamente responsables.

En Bio Pappel estamos certificados por FSC® y reducimos al mínimo el uso de fibra virgen para la producción de papel y cartón, ya que nuestras operaciones giran completamente en torno a un modelo de economía circular llamado Bosque Urbano®, ubicándonos entre las empresas más limpias de la industria.

Desde que la materia prima entra en nuestras plantas y se almacena en los patios de reciclaje inicia un proceso en el que ésta se separa de otros componentes. Posteriormente comienza la etapa de blanqueo, de la que se obtiene una pasta limpia, misma que después se convierte en papel. Cabe mencionar que dentro de esta línea de producción se incluye un sistema de reciclamiento de agua.

Es a través de esta visión sustentable de negocio que hemos logrado reducir nuestra huella ambiental considerablemente y por ello pretendemos continuar expandiéndola a lo largo y ancho del bloque económico de América del Norte. 

Hoy, el compromiso de Bio Pappel con la sustentabilidad se refleja a través de una fuerte motivación por continuar innovando y honrando el valor del papel dentro de nuestra cultura, sociedad y economía pero, sobre todo, del planeta.