La tendencia para 2024: detener el calentamiento global

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Escrito por verdes |

El 2023 fue un año marcado por un número importante de eventos climáticos que acentuaron […]

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El 2023 fue un año marcado por un número importante de eventos climáticos que acentuaron aún más la percepción de la crisis climática y el calentamiento global que atraviesa el planeta. Desde inicios de año, se anticipó la presencia del fenómeno conocido como el “niño” quien agudizaría aún más las condiciones de estrés atmosférico.

Y no vaciló, el fenómeno del niño hizo un año 2023 más cálido en comparación con los 24 meses previos, las sequías y los incendios forestales se extendieron por todas las regiones del planeta y se manifestaron desde los primeros meses hasta ya cerca de cerrar el año.

Prácticamente todos los termómetros de las grandes urbes del planeta registraron temperaturas récord haciendo los días más calurosos en muchas décadas. Los ciclones y huracanes también se hicieron más fuertes y riesgosos y cobraron la vida de muchas personas y desplazaron a otra gran cantidad de ellas agudizando aún más las condiciones de desarrollo y migración principalmente en los países más pobres.

Las voces que llaman a detener el deterioro climático sonaron un más fuerte durante 2023 que en años anteriores, pero esto es suficiente pues aún falta mucho trabajo por hacer para encaminar el desarrollo de la mayoría de los países del mundo hacia un modelo no dependiente de las energías fósiles y un desarrollo más sostenible, quizás éste sea el mayor desafío en un mundo en el que cada vez se amplía más la brecha entre naciones pobres y desarrolladas. 

No es cosa menor la crisis climática, ni tampoco sus efectos que ya son visibles en muchas naciones que antes no habían sufrido con severidad una sequía o una inundación, esto pese a que hay quienes siguen negando el calentamiento global, pero las condiciones de desarrollo y crecimiento, así como las circunstancias particulares de cada nación, hacen que alcanzar el objetivo de dejar atrás las energías fósiles se vuelva un reto mayor que sólo un asunto climático.

Por el ejemplo el recién electo presidente de Argentina Javier Milei, refirió en su discurso de toma de protesta que el asunto de la crisis climática no debería ser un impedimento para la recuperación de la economía de su país. El comentario es entendible si volteamos a ver la urgencia económica que atraviesa esa nación y su necesidad de revertir la situación de pobreza en que vive la población.

Argentina no es la única nación en el mundo que vive una emergencia económica y social. Durante la COP28 se habló de la “urgencia” y necesidad imperiosa de acelerar el tránsito hacia el uso de energías renovables en la mayoría de las naciones del mundo. Un reto de alcances colosales que tiene diversas aristas y múltiples riesgos y desafíos.

Aún así, es importante no perder de vista la necesidad de hacer frente a los efectos del cambio climático y adoptar las medidas necesarias para comenzar a limitar el aumento de la temperatura del planeta, es un asunto que en opinión de los especialistas consultados para elaboración del informe Tendencias de la Sustentabilidad 2024 es prioridad y concentra la mayor preocupación en el planeta.