Los costos del cambio climático en México

Desde la década de los 70, México presentó un aumento de temperatura de 0.3 grados en cada década, una cifra alta comparada con otras regiones en el mundo.

El planeta se calienta cada día más. Las perdidas de los recursos naturales son devastadoras. La elevada temperatura global y las actividades humanas están provocando extinciones como la del glaciar Ayoloco, ubicado en la cumbre del volcán Iztacíhuatl. Para dejar constancia, en lo que fue uno de los cuerpo de hielo permanentes de México, se colocó una placa cuyo mensaje dice:

“A las generaciones futuras: Aquí existió el glaciar Ayoloco y retrocedió hasta desaparecer en 2018. En las próximas décadas los glaciares mexicanos desaparecerán irremediablemente. Esta placa es para dejar constancia de que sabíamos lo que estaba sucediendo y lo que era necesario hacer. Sólo ustedes sabrán si lo hicimos”.

Se calcula que desde 1975, México se ha calentado cerca de 0.3 grados cada década, resultando una cifra alta al comparada con otras regiones del mundo. Se cree que para 2040, la temperatura del país crecerá a 2ºC. De persistir la inacción, la pérdida de paisajes continuaran y arrastraran a otros sectores como el económico.

Los costos acumulados durante el siglo que vive la humanidad serían comparables a perder entre el 50 por ciento y hasta más de cuatro o cinco veces el PIB actual, según se explicó en el Programa de Investigación en Cambio Climático (PINCC) de la Universidad Nacional Autónoma de México.

Y si de extender los pronósticos se trata, se dice que para 2070 en el país habría incrementos de hasta cuatro grados en la temperatura anual, lo que significaría un terrible e irreversible daño para ecosistemas e incluso algunos de ellos no podrían adaptarse y perecerían.

En la agricultura se prevén reducciones en rendimiento de cinco a 20 por ciento en las próximas dos décadas, y de hasta 80 por ciento a fin de siglo para algunos cultivos y entidades. El maíz de temporal podría perder, a finales de siglo, entre un 30 y 40 por ciento en rendimientos, según indica el programa de la UNAM.

Los expertos de la Universidad Nacional que elaboraron el proyecto afirmaron que la humanidad vive en una alerta roja parpadeante, pues al menos en el 2021 hubo una gran cantidad de muertes y pérdidas a consecuencia de los fenómenos extremos.

Ante el complejo panorama que se vislumbra, científicos hicieron una serie de propuestas que involucran a la academia y a protección civil, que son quienes van a reaccionar ante los fenómenos extremos para que los ciudadanos estén listos para hacerles frente.

Concretar la transición energética hacia energías renovables, incrementar las inversiones en ciencia y tecnología, son ciertas medidas que podrían aplicarse para afrontar la crisis climática.

Y como tarea dirigida a los individuos, científicos los convocan a consumir menos. Otras actividades que se sugieren son incrementar en las ciudades superficies y azoteas verdes, modificar el pavimento con materiales que permitan el paso del agua y mantener el suelo de conservación de los acuíferos.

Aún hay formas, tareas y oportunidades para reducir el calentamiento antes de que sea irremediablemente tarde.