Rusia aumenta sus exportaciones de petróleo
Escrito por verdes |
Según la Agencia Internacional de Energía, Rusia ha exportado más petróleo en abril que en […]
Según la Agencia Internacional de Energía, Rusia ha exportado más petróleo en abril que en cualquier otro mes desde el inicio de la guerra con Ucrania. Cerca del 80 por ciento de los envíos de crudo se dirigieron a China e India, lo que demuestra el éxito de Moscú en encontrar nuevos compradores para su petróleo en medio de las restricciones impuestas por Occidente.
Las exportaciones de petróleo ruso han experimentado un aumento significativo, sumando 50,000 barriles por día en abril y alcanzando un máximo de 8.3 millones de barriles por día. Esta cifra supera con creces los promedios de 7.7 y 7.5 millones de barriles por día registrados en 2022 y 2021, respectivamente.
El incremento en los envíos de petróleo refleja los esfuerzos de Rusia por encontrar nuevos mercados para su crudo después de que Europa bloqueara las importaciones y la utilización de nuevos buques para transportar los cargamentos hacia esos mercados.
Este éxito en la búsqueda de nuevos compradores muestra la capacidad de Rusia para adaptarse y responder a los desafíos impuestos por las restricciones comerciales. China e India han emergido como destinos clave para las exportaciones de petróleo ruso, lo que indica una diversificación de los mercados y una reducción de la dependencia de Europa.
“Rusia parece tener pocos problemas para encontrar compradores dispuestos a comprar su crudo y productos derivados del petróleo”, dijo la Agencia Internacional de Energía (AIE) en un informe mensual sobre el petróleo.
Sin embargo, a pesar de enviar más petróleo, los ingresos mensuales de exportación de petróleo de Rusia fueron 27 por ciento más bajos que en abril de 2022, según estimaciones de la AIE.
El organismo internacional señaló que la reducción en los ingresos se debe a la baja en el precio de este combustible a nivel global.
El aumento en las exportaciones de petróleo también tiene implicaciones económicas y geopolíticas. Por un lado, fortalece la posición de Rusia como uno de los principales actores en el mercado petrolero global y le brinda una mayor influencia en el escenario internacional. Por otro, plantea desafíos para los países europeos que han buscado reducir su dependencia de las importaciones de petróleo ruso.