Ganadería, causa dos tercios de las emisiones agrícolas
Escrito por verdes |
Las emisiones generadas por la ganadería representan 22 por ciento de los gases de efecto […]
Las emisiones generadas por la ganadería representan 22 por ciento de los gases de efecto invernadero de origen humano.
Un informe preparado por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) indica que la ganadería genera dos tercios de las emisiones de efecto invernadero del sector agrícola, que junto a la silvicultura y a otros usos del suelo son responsables del 22 por ciento de esos gases de origen humano. El reporte analiza los datos de sus 48 países miembros y de otras 11 economías emergentes.
El metano que generan los rumiantes con la fermentación de su digestión supone el 42 por ciento de las emisiones causantes del efecto invernadero de la agricultura, según precisa el reporte, mientras que el estiércol contribuye con un 8 por ciento – tanto por el metano como por el óxido nitroso. A eso hay que añadir el impacto de su deposición en la tierra.
En términos absolutos, los países que más contribuyen al calentamiento climático con su agricultura son India (750 millones de toneladas anuales del equivalente de CO2), China (700 millones) y Estados Unidos (650 millones). Brasil se ubica en cuarta posición (550 millones), por delante de la Unión Europea (400 millones, entre sus 27 países).
El caso de Brasil
La investigación de la OCDE precisa que Brasil es el país que más contamina en relación con su producción, seguido de Kazajistán, Filipinas, Islandia, Argentina, Nueva Zelanda, México, Estados Unidos e India. Lo anterior se debe al peso que tiene la ganadería de rumiantes en esos países o algunos tipos de cultivos que producen gran cantidad de gases de efecto invernadero, y sobre todo el arroz.
Cabe señalar que el cultivo de arroz es responsable por sí solo de un 11 por ciento de las emisiones agrícolas en los 54 países estudiados.
Por otra parte, se menciona que las ayudas para el sector agrícola en el periodo 2019-2021 totalizaron 817 mil millones de dólares anuales en los 54 países cubiertos por el estudio, un aumento del 13 por ciento respecto a los tres años previos. El organismo puntualizó que ese incremento se explica en parte por factores vinculados a las políticas públicas a favor de consumidores y productores durante la crisis del coronavirus.
De esa ayuda, se estima que 500 mil millones de dólares correspondieron a subvenciones públicas y el resto a transferencias por la vía de subidas de precios.
“Las políticas agrícolas a corto plazo en respuesta a las crisis mundiales deben abordar simultáneamente los retos actuales, las reformas que buscan luchar contra el cambio climático y las distorsiones en los mercados internacionales”, de acuerdo con la organización.
A la baja el peso relativo de los apoyos
En términos nominales, los apoyos para a la agricultura se han multiplicado por 2.4 desde el periodo 2000-2002. No obstante, al mismo tiempo el valor de la producción del sector se ha multiplicado por 3.3. Es decir, su peso relativo ha disminuido en los últimos 20 años.
De hecho, mientras en el periodo 2019-2021 representaron el 0.63 por ciento del producto interior bruto (PIB) de los países analizados, sumaban el 1 por ciento en el periodo 2000-2002. En los países de la OCDE, la ayuda representó 346 mil millones de dólares anuales en 2019-2021; dos tercios de los cuales se entregaron en Estados Unidos y la Unión Europea.
En el bloque de 27 países, representaron el 0.65 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), frente al 1.04 por ciento en 2000-2002. En el mismo periodo, en Estados Unidos pesaron de un 0.52 por ciento, comparado con un 0.65 hace dos décadas.
En las 11 economías emergentes que se incluyeron en el estudio, el sector agrícola recibió una inyección de 464 mil millones de dólares anuales en el trienio 2019-2021. El 60 por ciento de esa cifra fue para China, donde los apoyos para la agricultura supusieron un 1.80 por ciento del PIB en los tres últimos años.
A seis meses del inicio del conflicto bélico entre Rusia y Ucrania, la OCDE estima en el informe que, si bien “la disponibilidad general de alimentos o fertilizantes sigue siendo suficiente, el aumento de los precios de estos productos crea nuevos desafíos, especialmente en los países más pobres.
La OCDE realizará los próximos días 3 y 4 de noviembre una reunión ministerial dedicada a los retos para construir un sector sostenible.