Angola busca aprovechar su potencial energético
Escrito por verdes |
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Cuando se piensa en los grandes productores de petróleo, difícilmente se piensa en un país como Angola; sin embargo, este país es el segundo mayor productor de África después de Nigeria.
De acuerdo al último Informe mensual del mercado petrolero de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) el país subsahariano produjo un promedio de 1.4 millones de barriles diarios durante 2019 y apenas por debajo de 1.2 millones de barriles durante noviembre de 2020, lo que la convierte en el séptimo mayor productor de petróleo de esta organización.
En el país se han instalado las mayores empresas petroleras como Exxon Mobil, Equinor, BP y la estatal Sonangol, entre otras que han encontrado en el país las facilidades para desarrollar sus negocios debido a los grandes incentivos fiscales que ofrece el gobierno.
Recientemente, el presidente João Lourenço informó que dentro de la estrategia de expansión para el período 2019-2025 se contempla el otorgamiento de nuevas concesiones en 50 bloques, de los cuales al menos 20 ya fueron adjudicados.
Así el país busca convertirse en uno de los grandes jugadores petrolíferos del mundo, aunque en ese desarrollo también se ha señalado la alta contaminación ambiental que produce el país.
De acuerdo al estudio Petróleo, Pobreza y Medioambiente en Angola, de la Universidad de Agostinho Neto de Angola, la contaminación del mar producida por los derrames de petróleo procedentes de las perforaciones de las plataformas en los fondos marinos, de la limpieza y carga de los petroleros en el sistema offshore y de los residuos de las refinerías liberados en tierra afecta a amplias zonas de la costa angoleña, como por ejemplo, la Bahía de Luanda, donde las comunidades de pescadores de varias entidades litorales han disminuido sus capturas.
Para contrarrestar estos daños ambientales, recientemente el gobierno de Angola anunció un plan muy ambicioso donde se busca elevar a 80 por ciento el aporte de las fuentes limpias a su matriz energética, en un plazo de tres años.
Para ello está en construcción una de las centrales hidroeléctricas más grandes del mundo, la Caculo Cabaça. Cuando finalice la construcción permitirá incorporar alrededor de 2.1 gigawatts (GW) de potencia para la generación eléctrica.
Para lograr este objetivo también se buscará impulsar el uso de energía solar, y aprovechar la ubicación geográfica privilegiada que tiene, y abrir la invitación para que empresas internacionales inviertan en el desarrollo de esta tecnología en el país.
Sin embargo, algunas estimaciones indican que hasta el momento, el índice de electrificación apenas llega a 43 por ciento.
Así, un pequeño país que a atravesado interminables guerras internas, corrupción y pobreza, se enfila a ser una de las más desarrolladas en el tema energético.