Baterías de gravedad para obtener electricidad

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Las minas profundas que están en desuso podrían funcionar para instalar sistemas de baterías de […]

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Las minas profundas que están en desuso podrían funcionar para instalar sistemas de baterías de gravedad, las cuales ayudan a tener electricidad cuando aumenta la demanda.

Las minas profundas en desuso de todo el mundo tienen un gran potencial para instalar la tecnología conocida como almacenamiento de energía por gravedad, almacenamiento gravitacional o batería de gravedad.

Pero, ¿cómo funciona esto? La red eléctrica no suele consumir toda la energía eólica o solar que se produce. Entonces, en lugar de desperdiciarla, se utiliza para subir, con la ayuda de unos cables, un bloque pesado por el pozo auxiliar de la mina. Ahí se queda y, cuando aumenta la demanda de la red, se deja caer para que los cabestrantes se conviertan en generadores de electricidad.

El Instituto Internacional de Análisis de Sistemas Aplicados (IIASA) calcula que las minas profundas podrían dar cabida a hasta 70 TWh de energía, suficientes para satisfacer la demanda diaria mundial de electricidad.

De acuerdo con el Imperial College de Londres, las baterías de gravedad son más rentables que otras alternativas. También son más limpias, su vida útil es mayor y los bloques pueden ser de materiales reciclados, sin contar que pueden traer beneficios a las comunidades que antes vivían de la extracción de carbón, zinc o cobre.

La empresa escocesa Gravitricity aprovechará esta tecnología para construir el primer prototipo a escala real de una batería de gravedad. Estará en la mina Pyhäjärvi, en Finlandia, una de las más profundas de Europa, con 1,445 metros bajo tierra. Con su sistema de almacenamiento de energía denominado GraviStore podrá guardar hasta 2 MWh de energía.

Gravitricity ya está trabajando con empresas de Eslovenia, Alemania y República Checa para aprovechar minas en desuso. De hecho, la IIASA destaca que las grandes minas cuentan con la infraestructura básica para instalar las baterías de gravedad y que, incluso, están conectadas a la red eléctrica, lo que reduciría significativamente el costo de instalación.