China impugna aranceles de la UE a los vehículos eléctricos ante la OMC
Escrito por Manuel Pineda Curiel |
China presentó una queja formal ante la Organización Mundial del Comercio (OMC) en respuesta a […]
China presentó una queja formal ante la Organización Mundial del Comercio (OMC) en respuesta a la decisión de la Unión Europea de imponer aranceles de hasta el 45.3 por ciento a las importaciones de vehículos eléctricos (VE) chinos. Esta medida ha sido calificada como “proteccionista” por el Ministerio de Comercio chino, que afirma que afectará negativamente tanto a la cooperación comercial entre ambos mercados como a los consumidores europeos. La disputa surge tras una investigación de la Comisión Europea que concluyó que las subvenciones del gobierno chino a sus fabricantes de VE constituyen competencia desleal, debilitando a los fabricantes europeos.
La Comisión Europea defendió los aranceles, argumentando que son “proporcionados” y “necesarios” para proteger la industria automotriz europea, que emplea a millones de personas. Según la UE, las ayudas estatales de China han permitido a los fabricantes de VE, como BYD, Geely y SAIC, competir con precios significativamente más bajos, lo que plantea un riesgo de “daño económico” a los productores de Europa. Francia, uno de los principales impulsores de esta medida, considera que estos aranceles son esenciales para “defender los intereses comerciales europeos” en un sector estratégico como la industria automotriz eléctrica.
Por su parte, China rechazó las conclusiones de la investigación y calificó los aranceles como un acto de “proteccionismo” que no solo afectará a los fabricantes chinos, sino que también tendrá repercusiones en la transición verde de la UE y en la accesibilidad de los VE para los consumidores europeos. Además, China sostiene que la investigación de la UE contiene elementos “injustos e infundados” y ha prometido tomar todas las medidas necesarias para defender los derechos de sus empresas.
Posibles represalias comerciales
La tensión ha suscitado preocupación por una posible escalada en las disputas comerciales entre China y la UE. Algunas voces dentro de Europa, como la Asociación Alemana de la Industria Automotriz, advirtieron que los aranceles podrían ser contraproducentes y amenazan con desencadenar represalias de Beijing, incluyendo aranceles en productos europeos como licores, lácteos y productos agrícolas, un tema que ya está bajo revisión en el Ministerio de Comercio chino. La medida de la UE ha generado divisiones internas, ya que algunos países, como Alemania y Hungría, temen que esta disputa afecte negativamente sus propias exportaciones a China.