Contaminación, el lado oscuro de París 2024

Desde antes de comenzar los Juegos Olímpicos de París, algunos grupos ecologistas expresaron su preocupación por el impacto ambiental que el evento podría tener en la ciudad y el planeta. A pesar de los esfuerzos de los organizadores para promover unos Juegos sostenibles, las organizaciones medioambientales argumentan que las promesas pueden quedarse cortas frente a los efectos reales de tal magnitud de evento.

La construcción de nuevas infraestructuras, el aumento del tráfico aéreo y terrestre, y la afluencia masiva de visitantes son solo algunos de los factores que preocupan a los ecologistas. “Los Juegos Olímpicos generan una enorme huella de carbono, desde la construcción de estadios hasta el transporte de millones de personas,” señaló Jean-Luc Dupont, portavoz de Greenpeace Francia. “Las medidas de sostenibilidad prometidas, aunque bien intencionadas, no compensan el impacto ambiental total.”

Uno de los aspectos más controvertidos es la construcción de nuevas infraestructuras deportivas y de alojamiento. “Cada nuevo edificio implica la destrucción de hábitats naturales y el aumento de emisiones de CO2,” afirmó Marie Leclerc, directora de la organización ecologista Amigos de la Tierra. “Aunque se usen materiales sostenibles, la realidad es que estamos alterando ecosistemas que tardarán décadas en recuperarse.”

La logística de transportar a atletas, personal y espectadores es otra fuente significativa de contaminación. Según un informe de la organización Carbon Action Network, se estima que los Juegos Olímpicos de París 2024 generarán aproximadamente 3.5 millones de toneladas de CO2, principalmente debido al transporte aéreo internacional. “El transporte es uno de los mayores contribuyentes a las emisiones de carbono de los Juegos Olímpicos,” explicó Claire Durand, analista de Carbon Action Network. “Incluso con medidas como la promoción del transporte público y los vehículos eléctricos, la huella de carbono será considerable.”

La respuesta

Los organizadores de París 2024 han declarado su compromiso con la sostenibilidad, prometiendo unos Juegos “neutros en carbono”. Entre las medidas anunciadas se incluyen la compensación de emisiones, la construcción de instalaciones temporales y reutilizables, y la implementación de tecnologías de energía renovable. “Estamos haciendo todo lo posible para minimizar el impacto ambiental y dejar un legado positivo,” afirmó Tony Estanguet, presidente del Comité Organizador de París 2024. “Queremos demostrar que es posible organizar un evento de esta magnitud de manera sostenible.”

A pesar de estas promesas, los grupos ecologistas siguen siendo escépticos. “La neutralidad de carbono es un objetivo loable, pero es fundamental que haya transparencia y rendición de cuentas,” dijo Leclerc. “Los organizadores deben ser claros sobre cómo planean alcanzar estos objetivos y qué pasos están tomando para mitigar los daños ambientales.”

Las organizaciones ecologistas proponen varias soluciones para reducir el impacto ambiental de los Juegos Olímpicos. Entre ellas se incluyen la transparencia en las emisiones, para ello proponen publicar informes detallados sobre las emisiones generadas y las medidas tomadas para mitigarlas; incentivar el uso de trenes y otros medios de transporte con bajas emisiones en lugar de vuelos internacionales; priorizar el uso de instalaciones temporales que puedan ser desmanteladas y reutilizadas en otros eventos y asegurar que todas las instalaciones deportivas y de alojamiento utilicen energía 100 por ciento renovable.

Será al término de los Juegos Olímpicos cuando podamos tener una idea clara de la magnitud de contaminación que dejó el evento, lo que servirá para analizar su impacto ecológico y las medidas que puedan ser utilizadas para siguientes ediciones.