El 2023 fue el más mortífero debido al calor en Europa en la última década

Manuel Pineda Curiel

Escrito por Manuel Pineda Curiel |

Un reciente estudio liderado por el Instituto de Salud Global de Barcelona (ISGlobal), centro impulsado […]

Un reciente estudio liderado por el Instituto de Salud Global de Barcelona (ISGlobal), centro impulsado por la Fundación “la Caixa”, y publicado en Nature Medicine, ha revelado que el calor extremo en Europa durante el año 2023 resultó en más de 47,000 muertes, la segunda cifra más alta de la última década. Este dato subraya la creciente amenaza que representa el cambio climático para la salud pública en el continente.

El estudio, que se centró en analizar el impacto de las altas temperaturas en la mortalidad en Europa, destaca que el verano de 2023 fue uno de los más mortales de los últimos años. La investigación combinó datos de mortalidad con modelos climáticos para estimar las muertes atribuibles al calor extremo. Se utilizó un enfoque basado en el exceso de mortalidad, comparando las cifras de 2023 con las expectativas basadas en años anteriores.

Países más afectados

Entre los países más afectados se encuentran Italia, Grecia y España, que experimentaron olas de calor particularmente severas. Estos países registraron un exceso significativo de muertes durante los meses más calurosos del año. Italia, por ejemplo, reportó más de 18,000 muertes atribuidas al calor, siendo el país con el mayor número de víctimas en el continente. Grecia y España también registraron cifras alarmantes, con miles de muertes adicionales relacionadas con las temperaturas extremas.

Elisa Gallo, investigadora de ISGlobal y primera autora del estudio, explicó que “las altas temperaturas extremas son un problema creciente que está directamente relacionado con el cambio climático”. Gallo subrayó que las poblaciones vulnerables, como las personas mayores y aquellos con enfermedades crónicas, son las más afectadas por estos eventos climáticos extremos. “El impacto del calor en la mortalidad es una llamada de atención sobre la necesidad urgente de medidas de adaptación y mitigación para proteger la salud pública,” añadió.

El estudio de ISGlobal pone de manifiesto la necesidad de implementar estrategias efectivas para reducir el impacto del calor extremo en la salud pública. Esto incluye la mejora de los sistemas de alerta temprana, el fortalecimiento de la infraestructura urbana para reducir el efecto isla de calor, y la promoción de políticas que aborden el cambio climático de manera más agresiva.

El informe también sugiere que, si no se toman medidas inmediatas, el número de muertes relacionadas con el calor en Europa podría seguir aumentando en los próximos años, a medida que las olas de calor se vuelvan más frecuentes e intensas debido al cambio climático.

Este estudio es un recordatorio crucial de los riesgos que plantea el cambio climático para la salud global y la importancia de tomar medidas urgentes para mitigar sus efectos.