En crecimiento el cultivo de carne en laboratorios 

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Escrito por verdes |

Comer pollo sin que ningún animal haya sido sacrificado ya es posible gracias al cultivo […]

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Comer pollo sin que ningún animal haya sido sacrificado ya es posible gracias al cultivo de carne artificial que se elabora a partir de células animales cultivadas en laboratorios donde se enriquecen con nutrientes vegetales.

Esta carne es el resultado de un proceso llamado agricultura celular, que consiste en tomar una sola célula de un pollo vivo (por ejemplo, de una pluma) y alimentarla con un suero rico en proteínas, carbohidratos, lípidos, vitaminas y minerales extraídos de las plantas. Estos nutrientes estimulan el crecimiento y la multiplicación de las células animales, que se agrupan en fibras musculares y células de grasa. Estas estructuras le dan a la carne su apariencia, textura y sabor característicos.

La carne artificial de pollo se produce en un biorreactor, un recipiente de acero donde se controla la temperatura, el PH, el oxígeno y otros factores que influyen en el desarrollo celular. El proceso dura alrededor de 14 días y el producto final es carne cruda que se puede usar para hacer nuggets, hamburguesas, salchichas y otros alimentos.

Una de las ventajas de la carne artificial de pollo es que no requiere el sacrificio de ningún animal, lo que reduce el sufrimiento animal y el riesgo de enfermedades transmitidas por los alimentos. Además, tiene un menor impacto ambiental que la carne convencional, ya que disminuye la emisión de gases de efecto invernadero, el uso de agua y suelo.

Entre las empresas que están trabajando en la producción de carne artificial de pollo se encuentra Eat Just, una compañía estadounidense que en diciembre del 2020 obtuvo la aprobación de Singapur para vender sus nuggets cultivados en laboratorio. Otra empresa es Future Meat Technologies, una startup israelí que consiguió la mayor ronda de financiamiento en el sector de la carne de laboratorio con una ronda de 347 millones de dólares para desarrollar una tecnología para producir carne cultivada a bajo costo y gran escala. 

También destaca Memphis Meats, una empresa californiana que ha recibido apoyo financiero de Bill Gates y Richard Branson.

Industria de la carne artificial

La industria de la carne artificial está creciendo rápidamente. Sin embargo, de acuerdo con los especialistas hacerlo a escala industrial será la prueba de fuego ya que de ello dependerá que el precio pueda descender a un nivel accesible. Esta es la meta que persiguen las diversas compañías participantes en esta nueva carrera tecnológica, generalmente pequeñas start-ups, pero que en algunos casos ya han conseguido el apoyo de gigantes como Nestlé

A principios de 2021 Future Meats anunció que el costo de producir una pechuga de pollo era de 7.50 dólares. En junio abrieron un nuevo laboratorio en Rehovot (Israel) donde redujeron el precio a unos 3.90 dólares el filete. Pero tras varios meses de pruebas, la compañía ha reducido el costo hasta 1.70 dólares.

Según datos de la oficina de precios de EE.UU, una pechuga de pollo tradicional de 110 gramos tiene un costo de 0.80 dólares. La diferencia sigue siendo alta, pero comienzan a ser mucho más viables que hace años.

Por lo pronto, asistimos al despegue de la carne cultivada. La consultora McKinsey pronostica un mercado global de 25,000 millones de dólares para 2030.