Legisladores texanos buscan combatir fugas de sulfuro de hidrógeno (H2S)

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Legisladores de Texas urgen a abordar las fugas de sulfuro de hidrógeno, H2S, por parte de las petroleras en zonas residenciales.

Legisladores de Texas urgen a abordar las fugas tóxicas de sulfuro de hidrógeno (H2S) por parte de las compañías petroleras en zonas residenciales. Una investigación realizada por Examination y el Houston Chronicle reveló que estas compañías están emitiendo H2S, poniendo en riesgo la salud pública.

El H2S es un gas maloliente que surge junto con la producción de petróleo y es extremadamente peligroso. Las concentraciones altas pueden ser letales rápidamente, mientras que la exposición crónica a niveles bajos se asocia con diversos problemas de salud, incluidos daños neurológicos.

Aunque Texas tiene límites para el H2S en el aire, los reguladores a menudo ignoran estos límites, subestimando las amenazas para la salud.

Iniciativas legislativas en marcha

Judith Zaffirini, senadora demócrata de Laredo, dijo que en el próximo periodo legislativo dará prioridad a asegurar un financiamiento suficiente para los reguladores. Esto con el fin de que puedan monitorear los niveles de fugas tóxicas de sulfuro de hidrógeno y sancionar a los infractores.

Zaffirini, es la senadora con más tiempo en el cargo y con más proyectos de ley aprobados en Texas. Ahora, estudia la posibilidad de exigir actualizaciones de equipos a los infractores reincidentes. Mientras que buscará crear un fondo para ayudar a los operadores más pequeños a cumplir con las normativas. Además, podría prohibir la ventilación de H2S cerca de áreas pobladas y ordenar un estudio sobre riesgos para la salud por la exposición al H2S.

El representante Brooks Landgraf, presidente republicano del Comité de Regulación Ambiental, también está actuando frente a este problema. Es representante de un distrito en el oeste de Texas que incluye a Odessa, donde se han detectado repetidas fugas de H2S cerca de residentes y escuelas.

Landgraf está trabajando con la Comisión de Calidad Ambiental de Texas (TCEQ) y la Comisión de Ferrocarriles para garantizar el cumplimiento de las normativas. Insiste en que estas agencias sean transparentes y responsables ante la ciudadanía.

Pasividad de las autoridades

La TCEQ respondió a las preocupaciones de Landgraf, argumentando que la investigación de Examination y Houston Chronicle “malinterpreta” su respuesta a los problemas del H2S. La agencia afirma que se toma en serio las quejas y realiza estudios de control del aire e investigaciones de seguimiento.

Sin embargo, la investigación señala que los infractores rara vez son sancionados adecuadamente y los problemas persisten. Por ejemplo, una empresa en Odessa sigue operando sin cumplir con las órdenes de cumplimiento años después de recibir multas. Pese a las notificaciones de cumplimiento a Cambrian Management, el problema continúa.

La TCEQ concluyó su investigación tras una inspección que no encontró problemas, aunque un monitor independiente detectó niveles de H2S por encima del límite estatal.

Futuras acciones

El representante Ron Reynolds presentará un proyecto de ley para que la TCEQ y la Comisión de Ferrocarriles estudien los puntos críticos de toxicidad. También buscará aumentar el número de estaciones de monitoreo del aire y mejorar la cooperación entre agencias. La representante Penny Morales Shaw apoya medidas más estrictas contra los infractores ambientales reincidentes, enfatizando la necesidad de proteger la salud pública.

A nivel federal, aunque no existen normas de calidad del aire para el H2S, algunos congresistas están abogando por hacer cambios. La representante demócrata Yvette Clarke propuso sin éxito añadir el H2S a la lista de contaminantes peligrosos de la EPA. Y los esfuerzos del Sierra Club para regular el H2S fueron infructuosos debido a la oposición política e industrial.

La problemática de las fugas tóxicas de sulfuro de hidrógeno en Texas requiere una respuesta integral y efectiva por parte de los legisladores y reguladores. Las comunidades afectadas necesitan garantías de que se tomarán medidas concretas para proteger su salud, y que los infractores serán sancionados de manera efectiva.