IA, un aliado clave

David Luna, Periodista especializado en Industria y Tecnología

Escrito por David Luna, Periodista especializado en Industria y Tecnología |

En noviembre de 2022 el mundo cambió. Se lanzó ChatGPT y con eso inició la […]

IA

En noviembre de 2022 el mundo cambió. Se lanzó ChatGPT y con eso inició la era de la inteligencia artificial (IA) generativa para uso masivo de las personas. Sin duda, este paso es fundamental para la democratización de la IA. Como era de esperarse, a partir de entonces, la IA ha emergido como una herramienta fundamental para abordar diversos desafíos, como los ambientales y el fomento de las prácticas sostenibles en el mundo empresarial. 

Su capacidad para procesar y analizar grandes cantidades de datos en tiempo real no sólo optimiza procesos, sino que también ayuda a reducir emisiones y a gestionar recursos de manera más eficiente. Seguramente esto debe de ayudar a mejorar la medición de datos, la transparencia y el intercambio de información que pueda ser relevante para muchos actores, no sólo para quien la mide y genera. 

La IA se define como la habilidad de las máquinas para realizar tareas que tradicionalmente requerían inteligencia humana, como aprender, razonar y adaptarse. En el ámbito de la sostenibilidad, la IA se ha convertido en una aliada imprescindible para resolver problemas ambientales complejos. 

Desde predecir patrones climáticos hasta optimizar cadenas de suministro, su aplicación está contribuyendo directamente al cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). 

La integración de la IA en las operaciones empresariales abre un abanico de posibilidades para impulsar prácticas más sostenibles. Algunas de las más destacadas son:

  • Optimización de procesos: Gracias al análisis de datos, la IA puede detectar ineficiencias en los procesos de producción y sugerir mejoras, lo que se traduce en un menor consumo de energía y recursos. El primer paso de la sostenibilidad es cuestionar si podemos reducir el uso de materiales.
  • Reducción de emisiones: La monitorización en tiempo real de las emisiones de gases de efecto invernadero permite a las empresas implementar estrategias más efectivas para mitigar su impacto ambiental. Por ejemplo: tomar decisiones en tiempo real y no esperar a hacer medidas correctivas luego de meses.
  • Gestión eficiente de recursos: En sectores como la agricultura, la IA ayuda a determinar las necesidades exactas de riego y fertilización, optimizando el uso de agua y nutrientes. Esto permite que las decisiones sean basadas en datos, haciendo más sencilla la transferencia de conocimiento.

A pesar de sus múltiples beneficios, la implementación de la IA en iniciativas de sostenibilidad no está exenta de desafíos. Debemos garantizar que los algoritmos de IA sean transparentes y justos, evitando que puedan ampliar las desigualdades sociales. El entrenamiento y la operación de modelos de IA demandan una gran cantidad de energía, lo que podría contrarrestar parte de los beneficios ambientales que se pretenden alcanzar.

Varias compañías ya están aprovechando el potencial de la IA para avanzar hacia un futuro más sostenible. Mirando hacia adelante, el papel de la IA en la promoción de la sostenibilidad empresarial parece prometedor. Se espera que las empresas integren cada vez más esta tecnología en sus estrategias para alcanzar metas ambientales, sociales y de gobernanza (ESG, por sus siglas en inglés). Sin embargo, es crucial abordar los desafíos asociados, como el alto consumo energético y las implicaciones éticas, para asegurar que la IA contribuya de manera responsable y efectiva a un futuro más sostenible.

Los avances, y más los tecnológicos, siempre han traído una democratización del conocimiento. Sin duda que hoy toda persona que cuente con una computadora o un teléfono celular pueda acceder a la IA generativa. A diferencia de lo que hoy vemos, en donde sólo las grandes empresas tienen los recursos para aprovechar tecnologías complejas y costosas, considero que, de manera muy acelerada, la inclusión de empresas pequeñas y medianas a tecnologías precisas y eficientes será mucho más rápida. Si juntamos esto último con la colaboración estamos ante la oportunidad de acelerar el cumplimiento de los grandes objetivos que como humanidad nos hemos propuesto.