Los vehículos eléctricos de despegue y aterrizaje vertical, comúnmente conocidos como eVTOL por sus siglas en inglés, son una de…
Los vehículos eléctricos de despegue y aterrizaje vertical, comúnmente conocidos como eVTOL por sus siglas en inglés, son una de las tendencias más innovadoras en el campo de la movilidad aérea. Estos aparatos, que combinan las ventajas de los drones y los helicópteros, prometen ofrecer una solución eficiente, ecológica y segura para el transporte de personas y mercancías en entornos urbanos y rurales.
En la reciente feria AERO Asia, celebrada en Zhuhai, China, se exhibieron varios modelos de eVTOL desarrollados por empresas locales e internacionales. Entre ellos, destacó el Xpeng AeroHT, un automóvil que también puede volar como un dron gracias a sus ocho rotores desplegables sobre el techo. Este vehículo, que pesa unos 2,000 kilogramos, realizó su primer vuelo de prueba real durante el evento, demostrando su capacidad para alcanzar una velocidad de 130 km/h y una altura de 25 metros.
Otra empresa que llamó la atención fue eHang, pionera en el sector de los eVTOL en China. Esta compañía ha logrado obtener la primera certificación para volar un eVTOL comercialmente en el país asiático, lo que le da una ventaja competitiva importante frente a sus competidores. El eVTOL de eHang, llamado EH216, es un vehículo no tripulado que puede transportar a dos pasajeros a una velocidad máxima de 130 km/h y con un radio de acción de 30 kilómetros. El objetivo de eHang es crear una red de taxis aéreos autónomos que puedan ser solicitados mediante una aplicación móvil.
Además de eHang y Xpeng, otras empresas chinas como AutoFlight y EAVision también presentaron sus propuestas de eVTOL en la feria AERO Asia. Estas compañías se suman a las iniciativas globales que buscan impulsar esta tecnología, como las de Airbus, Boeing, Uber o Volocopter. Según un informe de la consultora Roland Berger, se espera que el mercado mundial de los eVTOL alcance los 90,000 millones de dólares para 2050, con una demanda anual de unos 430,000 vehículos.
La perspectiva de la industria para los siguientes años es optimista, pero también plantea varios desafíos. Entre ellos, se encuentran la regulación del espacio aéreo, la seguridad operativa, la infraestructura de carga y mantenimiento, la aceptación social y la rentabilidad económica. Estos aspectos requerirán una estrecha colaboración entre los actores públicos y privados involucrados en el desarrollo de los eVTOL.
