De acuerdo con la Asociación de Automóviles de Pasajeros de China (CPCA por sus siglas en inglés), al final de 2024, la venta de vehículos eléctricos e híbridos en el país asiático creció 40.7 por ciento.
El organismo reportó que al cierre de diciembre, la venta anual de autos eléctricos fue 10,988 millones sólo en el mercado chino. La fabricante de autos eléctricos BYD, se consolidó como la principal fabricante este tipo de vehículos, mientras que las marcas extranjeras de vehículos convencionales, poco a poco han comenzado a perder cuota de mercado en ese país.
Tesla, la empresa que prácticamente introdujo los autos eléctricos en China, también incrementó sus ventas en 6 por ciento durante 2024. Sin embargo, la empresa norteamericana ha comenzado a perder terreno frente a la competencia del mercado interno del gigante asiático dónde no sólo se compite en calidad e innovación tecnológica, también se está librando una feroz batalla por precio al público lo que comienza a restarle competitividad a la compañía de Elon Musk.
De acuerdo con algunos analistas, el boom de la fabricación de autos eléctricos en China que, se están disputando los mercados europeos y de América del Norte, se basa en los fuertes subsidios por parte del gobierno chino a las armadoras automotrices y los apoyos que son otorgados para adquisición de este tipo de autos, lo cual tipifican, como una competencia desleal que está alterando el mercado mundial de la industria automotriz y ha desatado una guerra de aranceles contra los vehículos provenientes del país asiático.
Sólo en diciembre pasado, se vendieron poco más de un millón de vehículos eléctricos en el mercado chino, de los cuales, el 50 por ciento fueron de la marca BYD de acuerdo con datos de la CPCA.
