Pasos para asimilar los estándares ASG
Escrito por Laura Elena Ramírez Barrón |
Cada vez son más las compañías que buscan incorporar tipos de acciones ASG como parte de su estrategia de negocio.
Actualmente, los temas de ASG han cobrado gran relevancia en el mundo en general, y de manera creciente con los inversionistas, quienes exigen una mayor transparencia y rendición de cuentas por parte de las empresas, lo que ha llevado a que cada vez sean más las compañías que buscan incorporar estos tipos de acciones como parte de su estrategia de negocio.
Como consecuencia de lo anterior, cada año existen más requerimientos de información y transparencia de ASG, manifestados en índices y rankings. Entre los nacionales tenemos a la Bolsa Mexicana de Valores, que en 2020 se unió con Standard & Poors y sustituyeron el IPC Sustentable por el S&P Bolsa Mexicana de Valores Total México ESG Index; por otro lado, se encuentra la Circular Única de las Afores, la AMEFIBRA y sus requerimientos de ASG, entre otros.
Aunado a estos, se encuentran los requerimientos internacionales como el Dow Jones Sustainability Index, Carbon Disclosure Project (CDP), GRESB y MSCI, entre otros. En estos estándares las compañías son comparadas con sus pares y con diferentes industrias, otorgándoles una calificación a sus acciones en materia ambiental, social y de gobierno corporativo.
De la misma forma, por el creciente interés de los inversionistas, el 2020 nos dejó importantes avances en el debate y la acción para la integración de los marcos y estándares de información ASG, en donde un grupo de inversionistas internacionales bajo la coordinación del Consejo Consultivo de Finanzas Verdes (CCFV), organismo representativo del sector financiero mexicano, realizaron un llamado a las emisoras para fortalecer la gestión e información de cambio climático, así como atender los requerimientos de información ASG de inversionistas con el uso de los Estándares de SASB y las recomendaciones de TCFD, y mantenerlos de forma complementaria a los Estándares GRI que ya se venían utilizando en los reportes integrados de las empresas.
Lo anterior, se sumó al hito de la firma en 2018 de la Declaración de Inversionistas sobre Divulgación de Información Ambiental, Social y de Gobierno Corporativo en México, para empujar los avances en la gestión y transparencia del desempeño.
Para Vesta este proceso de integración de criterios ASG al modelo de negocio, ha llevado casi 10 años, el cual dio inicio con su adhesión al Pacto Mundial en 2011 y continúa estando vigente con la creación de su Estrategia de ASG alineada a la Estrategia de Negocios Nivel 3 de la compañía.
Vesta es una empresa pública mexicana, que administra activos industriales a largo plazo en 15 estados de la república mexicana; es canal de inversión, propietaria, desarrolla, compra y vende bienes inmobiliarios para la industria.
Desde el 2011, la empresa ha destinado una parte importante de sus recursos a temas de sustentabilidad y responsabilidad social e inició la elaboración de sus Informes Anuales de Sustentabilidad en 2013. En 2017, elaboró su primer Análisis de Materialidad con la finalidad de identificar aquellos temas relevantes y de mayor impacto para su operación y para sus grupos de interés. Derivado de los hallazgos de dicho estudio se generaron diversas acciones y procedimientos que le permitieron dirigir sus esfuerzos y presupuesto en lo más relevante para el negocio.
Asimismo, el área de sustentabilidad fue reforzada en 2019 para abarcar temas ambientales, sociales y de gobernanza (ASG) bajo un enfoque mucho más integral y comprometido. En el mismo año, se preparó un plan estratégico hacia el año 2024, la Estrategia Nivel 3 y a esta misma se le incorporó el componente de ASG como parte integral de la misma con objetivos claros de corto, mediano y largo plazo; la cual permite gestionar de forma más integral los inmuebles de Vesta en corresponsabilidad con sus grupos de interés.
En 2020, Vesta se suscribió a los Principios de Inversión Responsable de las Naciones Unidas, con los cuales se está robusteciendo la estrategia ASG de inversión, para mejorar su proceso de debida diligencia y así poder implementar una estrategia de inversión responsable como parte de su proceso corporativo de venta y adquisiciones de propiedades y terrenos.
Asimismo, Vesta está consciente de que derivado del COVID-19 y de que en noviembre de este año se realizará la COP-26 se deben redoblar esfuerzos para mantenerse como líder en estos temas, por lo que se creará un grupo de trabajo que dará seguimiento al cumplimiento de dicha estrategia y robustecerá aún más su Programa de Compromiso con sus grupos de interés para continuar sumando a sus stakeholders a la estrategia.
Por ello, en la Compañía se sabe que es sumamente importante el formar parte de diversas rankeadoras nacionales e internacionales ya que, en particular, al área de ASG les ha servido como:
- Guía y herramienta de planeación estratégica de aspectos ASG, para disminuir riesgos, generar valor y cumplir con las metas de resiliencia y cambio climático.
- Una forma de demostrar la transparencia y rendición de cuentas del desempeño ASG con los grupos de interés.
A lo largo de estos 10 años, se han presentado diversos retos a lo largo de este proceso de implementación, que van desde entender e integrar dichos criterios como parte del ADN de la organización y como tal, volverlo parte de la cultura organizacional, e incluirlos en el día a día de la operación del negocio, así como mantenerse actualizados con las nuevas prácticas y tendencias de las estrategias ASG, que han aumentado su complejidad año con año.
Lo anterior, ha implicado reforzar el área de sustentabilidad o ASG que lidere los esfuerzos de la compañía y que revise los estándares internacionales ASG del sector para detectar fortalezas y oportunidades, actualizando o generando las políticas, procedimientos y en general las herramientas necesarias para cumplir y demostrar la implementación de dichos estándares.
En segundo lugar, en paralelo con el reporte de la revelación ASG, no hay que perder de vista el tema de la implementación de las iniciativas en materia de ASG; ya que en ocasiones, al enfocarnos tan sólo en el excesivo reporteo, la implementación puede quedar un poco de lado.
En tercer lugar, está el lograr contar con los indicadores de desempeño clave (KPIs), para saber dónde se encuentra la empresa, detectar oportunidades y establecer metas en línea con los ODS y la estrategia de la empresa. Es por ello, que en Vesta año con año se revisa la materialidad, la estrategia y los objetivos, para así avanzar en la agenda 2030-2050.
Finalmente, pero no por ello menos importante, se tiene el reto de organizarse y hacer equipo con sus grupos de interés para poder alcanzar juntos las metas en común, a través de la implementación de diferentes acciones específicas por grupo de interés y con el único objetivo de lograr las metas planteadas en común.
