Transformar la agricultura para no desperdiciar alimento

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La Embajada de la República Federal de Alemania en México y Bayer, dentro del marco […]

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La Embajada de la República Federal de Alemania en México y Bayer, dentro del marco de los “Diálogos por un Futuro Sostenible”, organizaron un espacio de reflexión y debate entorno a los desafíos globales, específicamente del desperdicio de alimentos.

De acuerdo con datos de la FAO, aproximadamente un tercio de todos los alimentos producidos para el consumo humano no llega a la mesa, debido a que se pierde o desperdicia en el camino. Las emisiones generadas durante su producción se suman al creciente cambio climático.

En este caso, México se encuentra entre los 20 países que más alimentos desperdician en el mundo, con un promedio per cáspita de 94 kilos, 27 por ciento más del promedio global, según datos del Programa para el Medio Ambiente de la ONU (FAO).

“Nuestros sistemas alimentarios deben ser sostenibles para ser resilientes y la agricultura regenerativa se erige como una alternativa que no solo genera un impacto positivo en el medio ambiente, sino que también promueve la revitalización de los recursos esenciales. Al mismo tiempo, contribuye activamente a disminuir el desperdicio de alimentos, abriendo la puerta a un manejo más eficiente de la cadena de suministro, desde la producción hasta el consumo”, dijo Manuel Bravo, CEO de Bayer.

Wolfgang Dold, Embajador de Alemania en México mostró su interés ante las altas estadísticas de desperdicio de alimentos a nivel mundial y subrayó la notable paradoja de que, a pesar de estas cifras significativas, los países todavía no logran satisfacer adecuadamente las necesidades de alimentación de la población.

El campo para reducir el desperdicio

Uno de los puntos principales en el espacio fue el papel crucial de introducir avances científicos y tecnológicos en los sistemas agrícolas, así como el desarrollo de prácticas sostenibles y eficientes que permitan optimizar la producción y minimizar las pérdidas antes de la cosecha.

La aplicación de la tecnología, como sistemas de monitoreo, sensores agrícolas y métodos avanzados de almacenamiento permiten al sector trabajar en estrecha colaboración con todos los productores para identificar y abordar los desafíos en las primeras etapas de la cadena de suministro. Dichas soluciones tecnológicas no solo mejoran la eficiencia de la producción, sino también reducen la probabilidad de desperdicio de alimentos antes de llegar al consumidor final.

La representante de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) en México, Lina Pohl señaló la necesidad de transformar los sistemas agroalimentarios para hacerlos más sostenibles y resistentes al cambio climático, y al mismo tiempo productivos, equitativos y empoderadores.