Detener el cambio climático es tarea de todos

Por: Martín Rincón Arredondo, Director de Operaciones y Sustentabilidad de Bio Pappel

Como cada enero desde hace más de 50 años, funcionarios de más de 100 países, organizaciones internacionales, líderes de la sociedad civil, expertos, así como representantes de la juventud, emprendedores sociales y medios de comunicación se reúnen en Davos, Suiza para el Foro Económico Mundial.

Es bien sabido que este foro tiene como objetivo analizar las principales problemáticas del mundo actual, siendo sin duda el cambio climático una de las más urgentes por su avance tan precipitado según expertos.

En este sentido, la reunión del Foro Económico Mundial nos recuerda el papel que tenemos como iniciativa privada para contribuir a la disminución de las emisiones y la responsabilidad de hacer más sustentables nuestras operaciones para así frenar el calentamiento global. 

Bajo este contexto las acciones aisladas ya no son suficientes, es clave incorporar la sustentabilidad a cada uno de nuestros procesos, es decir, integrarla a nuestro ADN y filosofía empresarial para que poco a poco se comiencen a romper los mitos que frenan el avance de los esfuerzos para combatir el cambio climático. Yo me pregunto, ¿Valen la pena los esfuerzos que estamos realizando para cuidar de nuestro planeta y preservarlo para las futuras generaciones? 

Definitivamente sí, pero si se trata de hablar de negocios es importante operar bajo los estándares ESG para mantener la rentabilidad. Por ello, dentro de Bio Pappel trabajamos bajo estos criterios y hoy podemos sentirnos orgullosos que los empaques de papel y cartón de alta calidad que producimos son hechos con materia prima 100 por ciento reciclada para cumplir el objetivo de que los árboles sigan siendo árboles y los bosques cumplan su función de ser los pulmones del planeta y preservar su biodiversidad. 

Como empresa de consumo también tenemos una gran responsabilidad de extender el ciclo de vida de nuestros productos y por ello, nos cuestionamos ¿qué hacer cuando cumplen su función? Esa pregunta nos la hicimos hace ya algunas décadas y fue así que implementamos el concepto de economía circular al crear nuestro modelo llamado Bosque Urbano^Ⓡ.

Bajo este modelo, reciclamos millones de toneladas de papel y cartón en desuso, evitando así que lleguen a los rellenos sanitarios. Esta simple acción pudiera parecer sencilla, sin embargo, impacta positivamente desde varios ángulos. 

1)    Evita la contaminación de suelos y generación de emisiones. Todos los días se generan miles de toneladas de residuos sólidos que al descomponerse generan líquidos tóxicos que permean a los suelos y despiden gases de efecto invernadero. En la Ciudad de México se generan 1,487 toneladas de residuos diarios en promedio, de los cuales, solo el 5 por ciento son reciclados. 

2)    Se evita talar más árboles: Al usar materia prima reciclada, no es necesario talar árboles y con ello protegemos los bosques. 

3)    Generación de empleos: La industria del reciclaje es una fuente importante de empleos.

En resumen, cumbres como el Foro Económico Mundial son relevantes para lograr acuerdos globales, sin embargo, es responsabilidad de cada uno contribuir para disminuir nuestro impacto ambiental y favorecer a nuestro entorno.