Devoradora de carbono ayudaría a alcanzar las cero emisiones

Manuel Pineda Curiel

Escrito por Manuel Pineda Curiel |

La captura y almacenaje de CO2 llega a otro nivel con una nueva planta que […]

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La captura y almacenaje de CO2 llega a otro nivel con una nueva planta que promete capturar carbono de forma acelerada durante los siguientes años.

En un paraje solitario y helado, la empresa suiza Climeworks puso en funcionamiento su planta de captura y almacenamiento directo de aire (DAC+S) más grande del mundo, denominada Mammoth. Este proyecto, ubicado en Islandia, representa un avance significativo en la tecnología de captura de carbono, pues tendrá una capacidad de hasta 36,000 toneladas de CO2 al año una vez que esté completamente operando, lo cual será a finales de 2024.

La planta, ubicada en Hellisheidi, comenzó su construcción en junio de 2022 y ha logrado grandes avances en un corto periodo. Diseñada con un enfoque modular, actualmente cuenta con 12 de los 72 colectores de CO2 instalados y operativos. Este diseño permite una escalabilidad eficiente, facilitando futuras expansiones y mejoras tecnológicas.

Tecnología de punta

Para alimentar su proceso de captura directa de aire, Mammoth utiliza energía geotérmica proporcionada por ON Power. El CO2 capturado se disuelve en agua y se inyecta en el subsuelo, donde reacciona con roca basáltica y se convierte en piedra, asegurando un almacenamiento permanente. Este proceso innovador y menos intensivo en energía es una mejora respecto a la planta Orca, el predecesor de Mammoth, y subraya la colaboración entre Climeworks y Carbfix, la empresa responsable del almacenamiento.

Christoph Gebald, cofundador y co-CEO de Climeworks, expresó que, basándose en las curvas de escalamiento más exitosas, alcanzar una capacidad de gigatoneladas para 2050 significa escalar el proceso a megatoneladas para 2030. “Nadie ha construido antes lo que estamos construyendo en DAC, y somos realistas en cuanto a que la forma más segura de tener éxito es operar la tecnología en el mundo real lo más rápido posible y desplegarla sin descanso”, ahondó.

Además de sus proyectos en Islandia, Climeworks está desarrollando múltiples centros de megatoneladas en los Estados Unidos y explorando proyectos adicionales en Noruega, Kenia y Canadá. Estos esfuerzos globales están diseñados para expandir la capacidad de captura de carbono y contribuir significativamente a los objetivos climáticos internacionales.