Eficiencia energética más allá de una moda

Por Claris González Monreal, Fundadora de SM Global

En la última década, la creciente preocupación por el cambio climático y la sustentabilidad ha llevado a una transformación significativa en diversas industrias. Entre ellas, destaca la adopción generalizada de equipos amigables con el medioambiente y con la eficiencia energética. Empresas, gobiernos y consumidores en todo el mundo están reconociendo la necesidad de reducir la huella ecológica y de promover prácticas más responsables. Esta tendencia ha demostrado ser un paso crucial hacia la mitigación de los impactos ambientales y la búsqueda de un futuro más sustentable.

Impacto de nuestras necesidades

Lamentablemente, el sector energético es uno de los que produce más contaminantes. De hecho, la producción de energía genera hasta el 60 por ciento del CO2 que llega a la atmósfera. Lo anterior se deriva, tanto del uso de combustibles fósiles, como de la importancia que tiene la energía en nuestra vida, la cual repercute en su alta demanda.

Se estima que el mundo consume 85 billones de kWh tan sólo de energía comercial, sin contar la que se obtiene de manera informal, como con la quema de madera o de carbón. De acuerdo con datos de Generac, los países que más requieren energía suelen ser aquellos con mayor población y un fuerte sector manufacturero. En este sentido, China se posiciona en primer lugar con un consumo anual de 6,453.17 tWh, seguido de Estados Unidos con 3,989.57 e India con 1,277.7. Se estima que México tiene un consumo anual de 267.61 tWh, que, aunque a primera vista está muy alejado del país asiático, su consumo de la energía cada día va en aumento.

El auge de la eficiencia energética

La eficiencia energética es un pilar fundamental en la lucha contra el cambio climático. En todos los sectores, desde la industria hasta el hogar, la optimización del consumo energético se ha convertido en una prioridad. Los equipos amigables con el medioambiente están diseñados para minimizar el uso de energía, reduciendo así las emisiones de gases de efecto invernadero y la dependencia de fuentes no renovables.

Así, las empresas toman cada día un papel más protagónico en la alfabetización y la concientización del uso eficiente de la energía. Por ello, han proporcionado a los consumidores una sencilla forma de identificar el nivel de consumo y la eficiencia energética de los electrodomésticos de uso cotidiano en una sencilla clasificación en las etiquetas. Éstas pueden ser representada por letras (por ejemplo, de la A a la G, donde A es la más eficiente), números (como del 1 al 7, donde 1 es el más eficiente) o colores (como verde para los más eficientes y rojo para los menos eficientes). Esta clasificación permite una rápida comparación entre productos similares.

La etiqueta proporciona información sobre el consumo de energía del producto. Por lo general, muestra el consumo anual estimado de energía en kWh u otra unidad de medida relevante. Esta cifra sirve como punto de referencia para evaluar la eficiencia energética de diferentes productos y calcular el gasto energético esperado.

En el sector industrial se están implementando tecnologías avanzadas, como la iluminación LED, equipos de producción más eficientes y sistemas de gestión inteligente. Las empresas han comenzado a comprender que la inversión inicial en tecnología verde no sólo beneficia al medioambiente, sino que también conlleva ahorros significativos a largo plazo en costos operativos y mantenimiento.

Energías renovables y equipos verdes

La transición hacia fuentes de energía más limpias también ha sido una pieza clave en la promoción de equipos amigables con el medioambiente. Las energías renovables, como la solar, la eólica, la hidroeléctrica y la geotérmica, han experimentado un crecimiento significativo en todo el mundo. Estas fuentes de energía son utilizadas para alimentar equipos industriales, vehículos eléctricos, sistemas de iluminación y hogares, reduciendo drásticamente las emisiones de carbono.

Además, las compañías manufactureras están cambiando su enfoque hacia la producción de equipos verdes y sustentables. Desde la fase de diseño hasta la elección de materiales, se está prestando más atención a la reducción del impacto ambiental durante toda la vida útil del producto. Esto implica un enfoque en la durabilidad y la reciclabilidad, para minimizar la generación de residuos y la necesidad de extraer nuevos recursos.

Políticas y normativas impulsoras

Gobiernos de todo el mundo están desempeñando un papel fundamental en la promoción de equipos amigables con el medioambiente y la eficiencia energética. Se están implementando políticas y normativas que fomentan la adopción de tecnologías verdes y establecen estándares mínimos de eficiencia energética.

Algunos países ofrecen incentivos fiscales y financieros para fomentar la compra de equipos eficientes y la instalación de energías renovables. Asimismo, se están estableciendo regulaciones más estrictas para eliminar gradualmente la fabricación y la venta de equipos ineficientes y contaminantes.

Como podemos ver, la tendencia mundial hacia el uso de equipos amigables con el medioambiente y la eficiencia energética es una señal clara de un cambio de mentalidad global hacia la sustentabilidad. Empresas, gobiernos y consumidores están adoptando prácticas responsables y reconociendo la importancia de reducir la huella ambiental.

Esta transición no sólo contribuye a la mitigación del cambio climático y a la preservación de los recursos naturales, sino que conlleva beneficios económicos, como ahorros en costos operativos y la creación de empleos verdes.

Sin embargo, aún queda mucho por hacer. La adopción masiva de equipos amigables con el medioambiente debe continuar y expandirse a todas las industrias y sectores. Pero únicamente a través de un esfuerzo conjunto y del compromiso global podemos garantizar un futuro sustentable para las generaciones venideras.