La falta de gas ruso reactiva las centrales de carbón en Europa

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Recientemente, Austria anunció que reactivará la planta de carbón en Mellach, debido a la falta […]

Recientemente, Austria anunció que reactivará la planta de carbón en Mellach, debido a la falta de abastecimiento de gas ruso.

El abastecimiento de gas está siendo disminuido en la mayoría de los países de la Unión Europea (UE) derivado de su posicionamiento ante el conflicto bélico entre Rusia y Ucrania. Entre ellos está Austria, que recientemente anunció que reactivará la planta de carbón en Mellach.

La decisión es una medida preventiva en caso de tener que producir más energía por la falta del combustible ruso. La planta cerró sus puertas en 2020 como parte del camino hacia la neutralidad de emisiones del país, se espera que su reapertura tarde algunos meses.

Sin embargo, Austria no es el único país en tomar estas medidas. Alemania y Francia también van por el mismo camino. Esto perjudica los objetivos de la UE de cara al 2030, que buscan una reducción del 55 por ciento en las emisiones de gases de efecto invernadero.

Levantó algo de polémica esta acción, principalmente por lo mencionado anteriormente. La guerra entre Rusia y Ucrania no debería tomarse como excusa para retomar las operaciones en centrales generadoras de energía que contaminan el doble que las de gas. En todo caso, se debería impulsar a que se acelere el desarrollo del uso de fuentes renovables para cumplir con el Pacto Verde Europeo y lograr la neutralidad de carbono para mitad de siglo.

Cada año los países de la UE consumen, aproximadamente, 400 billones de litros de gas anualmente. De ese total, cerca del 40 por ciento es recibido por los gasoductos rusos. El siguiente gran exportador de gas es Noruega, con el 20 por ciento de abastecimiento.

Hay varias alternativas que se están considerando para hacerle frente al corte del suministro. Entre ellas está complementar la necesidad del combustible con importaciones desde África. Algunos países como Senegal, Nigeria y Angola podrían entrar en el ejercicio.

Otra opción es el proyecto RePower de la Comisión Europea. El cual consiste en dejar la dependencia de los hidrocarburos de Rusia y avanzar más rápido con las energías renovables. Sin embargo, tiene un alto costo, se estima que requerirá de una inversión de alrededor de un billón de euros. La Comisión Europea no ha sido clara con las cantidades para lograr los objetivos, pero se cree que pueda haber 225 mil millones de euros disponibles para préstamos, es decir, apenas una cuarta parte del monto requerido.

En México solamente hay tres centrales termoeléctricas a base de carbón. En el resto del mundo están en funcionamiento otras 2,330, con China, Estados Unidos e India con el mayor número de plantas de este tipo, cada uno con 946, 286 y 253 respectivamente.

En México, el estado de Coahuila tiene a dos de las tres centrales, la José López Portillo (también conocida como Carbón I) y la Carbón II. Mientras que la otra está en Guerrero, en el Municipio La Unión, la Petacalco o más conocida como la Central Termoeléctrica Presidente Plutarco Elías Calles.

El 6.9 por ciento de la energía eléctrica del país fue producida de esta fuente, según datos de la Comisión Federal de Electricidad (CFE). Por su parte, el turbogas representó el 2.3 por ciento, pero la mayor fuente de producción de energía, proviene de las centrales de ciclo combinado con 36.2 por ciento, seguida de las hidroeléctricas con el 25.4 por ciento.