La gran desintoxicación: UE sin sustancias químicas peligrosas

Para lograr la gran desintoxicación de sustancias químicas peligrosas, la Unión Europea prohibirá miles de sustancias que se utilizan en maquillajes, juguetes e incluso productos para bebés. 

Desde comienzos del año 2022, científicos ya hablaban de que la contaminación química había cruzado un “límite planetario” y rebasarlo ponía en peligro la supervivencia de la humanidad. 

El informe ‘Derecho a un medio ambiente limpio, saludable y sostenible: el medio ambiente no tóxico’, publicado en febrero por la ONU, señala que la contaminación por pesticidas, plásticos y residuos electrónicos está causando al menos 9 millones de muertes al año. Un estimado más alto de los decesos que ha provocado el COVID-19. 

Los investigadores instaban a una “acción inmediata y ambiciosa” para prohibir algunas de las sustancias tóxicas y es la Unión Europea quien ya planea su desintoxicación.

Y es que se estima que utilizan cerca de 200 mil productos químicos, mismos que la industria desarrolla cada 1.4 segundos. 

Ante ello, pusieron en marcha un proyecto restrictivo donde miles de sustancias nocivas y/o tóxicas serán prohibidas, pues algunas de ellas se siguen utilizando en maquillajes, juguetes e incluso productos para bebés. 

La llamada ‘gran desintoxicación’ promete mejorar la seguridad de prácticamente todos los productos y disminuir la intensidad química de hogares, escuelas y zonas de trabajo. 

El plan tiene en la mira categorías completas de productos, como los plásticos PVC, bisfenoles -con los que se fabrican plásticos duros como el de las botellas de agua. También contempla a las ‘sustancias químicas eternas’, denominadas así por el tiempo que tardan en degradarse. 

El plan de la Unión Europa abre un capítulo nuevo para hacer frente a las amenazas de las sustancias nocivas, sin embargo, es urgente que se asuman límites más estrictos en todo el mundo, pues estos contaminantes navegan por el planeta y terminan muy lejos de donde se originaron.

La preocupación entre los ciudadanos se acrecentó pues ciertas sustancias están vinculadas con infertilidad, cáncer, deficiencia de vacunas, entre otros problemas de salud. Una encuesta de la Comisión Europea señala que 84 por ciento de los habitantes están preocupados por su salud y el 90 por ciento por los efectos en el medio ambiente. 

Científicos convocan a más países a sumarse a iniciativas ambiciosas, pues a pesar de que existe un comercio internacional de residuos, hay regiones poco desarrolladas a donde pueden llegar grandes cantidades de sustancias tóxicas. Y además el reciclado tampoco puede ser el adecuado. 

Por ello, entre más países con más oportunidades de desintoxicarse, habrá más ayuda a los más vulnerables y por ende a más comunidades del planeta.