La UE avanza hacia sus objetivos de reducción de energía para 2030

La Unión Europea (UE) ha logrado un importante avance en materia de eficiencia energética durante el año 2022, según los datos revelados por la Oficina Europea de Estadística (Eurostat). Estos resultados, que reflejan una disminución tanto en el consumo de energía primaria como en el consumo de energía final, indican un progreso positivo en la dirección de los objetivos establecidos para 2030.

De acuerdo con las últimas cifras recopiladas por Eurostat, el consumo de energía primaria en la UE alcanzó 1,257 millones de toneladas equivalentes de petróleo (Mtep) en 2022, experimentando una notable disminución del 4.1 por ciento en comparación con el año anterior. Este descenso coloca a la UE más cerca de su ambicioso objetivo para 2030, fijado en 992.5 Mtep, reduciendo la brecha a un 26.7 por ciento.

En lo que respecta al consumo de energía final, se registró una reducción del 2.8 por ciento durante 2022, alcanzando los 940 Mtep. Aunque esta cifra se encuentra 23.3 por ciento por encima del objetivo de 2030 (763 Mtep), representa un avance positivo en comparación con el año 2021, donde la diferencia era más amplia, situándose en 26.8 por ciento.

Estos indicadores están alineados con los objetivos revisados para 2030, establecidos en la Directiva de Eficiencia Energética de 2023, la cual insta a la UE a no superar los 763 Mtep en consumo de energía final y los 992.5 Mtep en consumo de energía primaria.

Ahorro de energía

La UE está encaminada a cumplir con sus objetivos de ahorro de energía, instando a los países miembros a incorporar la eficiencia energética en sus políticas y decisiones de inversión, tanto en los sectores energéticos como no energéticos.

Es relevante destacar que, aunque en 2020 se registró una disminución del consumo de energía primaria debido a la pandemia, los resultados de 2022 son alentadores, superando incluso los niveles de 2019, antes de la crisis sanitaria.

Eurostat señala que los 1,257 Mtep de consumo de energía primaria en 2022 representan el segundo nivel más bajo desde 1990, siendo el año 2020 el de menor consumo con 1,236 Mtep. Asimismo, el consumo de energía final en 2022, con 940 Mtep, iguala el nivel registrado en 1995, mostrando una mejora sustancial desde el punto más bajo en 2020, con 906 Mtep.

Estos logros posicionan a la UE como un referente en la búsqueda de una transición hacia un futuro más sostenible y eficiente desde el punto de vista energético. A medida que la UE continúa avanzando, se espera que sus experiencias y estrategias inspiren a otras regiones del mundo a seguir un camino similar hacia la sostenibilidad energética.