Los materiales de tu smartphone pueden tener una segunda vida

Por: Martha Vegas, Líder de Sostenibilidad de Telefónica Hispam

Darle una segunda oportunidad a los dispositivos electrónicos, como un smartphone y sus componentes es parte de las soluciones para cuidar el planeta en el que todos vivimos.

Como sociedad tenemos una forma de vida acompañada de una gran cantidad de innovaciones y tecnología, con importantes beneficios, pero también nuevos retos que se deben afrontar.

Ropa, zapatos, llantas, botellas de PET, latas y cartón son algunos objetos que pueden tener una segunda vida, y los smartphones, no son la excepción. El reciclaje de estos gadgets se ha convertido en una importante acción que como consumidores responsables debemos realizar. 

En 2019, el 71 por ciento de los encuestados cambiaron de smartphone en los 18 meses recientes, indicando una frecuencia relativamente alta de cambio, de acuerdo con el estudio “Hábitos de los consumidores móviles en México” de Deloitte.

La ONU señala, que cada año se producen alrededor de 50 millones de toneladas de desperdicios electrónicos y eléctricos a nivel mundial, de las cuales solo 20 por ciento se recolecta y recicla de manera adecuada, por lo que aún existe mucho trabajo por hacer al respecto.

Nuestro país, es un importante productor de residuos y no se salva de este problema. El Reporte 2021: Viviendo la Economía Circular, detalla que sólo en 2019 se produjeron en México poco más de 1.2 millones de residuos electrónicos obsoletos.

Destaca, el caso de la Ciudad de México, la entidad que registra la generación de la mayor cantidad de basura de esta naturaleza al interior de nuestro territorio, con poco más de 117 mil 550 toneladas (11 por ciento) de residuos.

Por ello, es importante conocer los materiales con los que está elaborado nuestro smartphone, y que puede ser reutilizado o reciclado para la fabricación de otros productos o bien, que requieren un tratamiento especial para su eliminación. En un celular inteligente, por ejemplo, se pueden encontrar desde aplicaciones cerámicas, resina epóxica, plástico o metales de tierras raras, hasta 60 elementos de la tabla periódica como acero, platino, cobre, paladio, cobalto y litio —apreciados por su alta conductividad.

A ello se le agregan otros elementos como las baterías, cámaras, pantallas, cargadores y procesadores, que al irse a la basura común, pueden generar un gran daño a la tierra y a los sitios naturales.

Es necesario que trabajemos en la recolección y reciclaje del e-waste como está sucediendo ya en otros sitios. En Tokio, Japón, por ejemplo, con una participación del 90 por ciento de sus ciudades y pueblos, las personas dieron sus antiguos dispositivos electrónicos para producir alrededor de 5 mil medallas de bronce, plata y oro para los Juegos Olímpicos de Tokio 2020.

Los materiales al reciclarse y reutilizarse pueden convertirse en materias primas secundarias para la fabricación de nuevos artículos, evitando así el 14 por ciento de las emisiones totales de carbono para 2040 por producción y uso de dispositivos electrónicos. 

Los desechos tecnológicos pueden servir para el armado de piezas de repuesto, chatarra, asfalto, la industria automotriz, o en materiales didácticos para fines educativos, tal es el caso del aprendizaje y reforzamiento de la ingeniería mecatrónica, que busca formar a estudiantes y aumentar las capacidades de investigación tecnológica mediante la manipulación de los artefactos. 

El impacto ambiental de los smartphones

En Telefónica Movistar sabemos de la importancia de fomentar la cultura de la reutilización y reciclaje de los aparatos electrónicos, porque además de darle un segundo uso a estos dispositivos, también promovemos el cuidado del medioambiente.

Desde 2006, hemos impulsado un programa permanente de reciclaje y en los últimos años concretamos una alianza con REMSA para impulsar el reciclaje y recolección, donde las personas al reciclar cinco dispositivos pueden solicitar que acudan a su casa o a la dirección que más les convenga para la entrega de los dispositivos.

Cada uno de nosotros podemos ser parte de la solución de los grandes retos a los que nos enfrentamos, por ejemplo, el impacto ambiental de los smartphones que utilizamos, lo podemos considerar antes de su compra con Eco Rating, una iniciativa, que evalúa todo el ciclo de vida del terminal, desde la extracción de materiales necesarios para su fabricación, el transporte y uso, hasta su eliminación o reciclaje. 

Tomar decisiones más informadas, promover un menor impacto de los smartphones en su fabricación y reciclar los dispositivos, son sin duda acciones que cada uno de nosotros podemos llevar a cabo e impulsar con nuestras familias y conocidos, favoreciendo un consumo más responsable y sostenible. Cuidemos todos la casa de todos. No tenemos un planeta de repuesto.