Ejidatarios veracruzanos protegen y plantan nuevos manglares

La Fundación Pedro y Elena Hernández, junto con un grupo de ejidatarios veracruzanos, protege 464.25 hectáreas de manglares en la Laguna de Tamiahua, ubicada en la Huasteca Veracruzana. Además, han plantado más de 2,000 nuevos mangles, lo que se ha sido vital en la lucha contra la degradación ambiental de los manglares en México.

Esto tiene lugar mediante un programa de Pago por Servicios Ambientales (PSA) con la Comisión Nacional Forestal (Conafor).

“La conservación y restauración de los manglares es fundamental no sólo para preservar su biodiversidad y funciones ecológicas, sino también para proteger las comunidades humanas que dependen de ellos. Es esencial continuar apoyando y promoviendo iniciativas que aseguren la protección y sostenibilidad de estos valiosos ecosistemas”, explicó Bárbara Hernández, presidenta de la Fundación, en un comunicado.

¿Por qué son relevantes estos humedales?

El Ejido Colonia La Reforma, donde tiene lugar este programa, es muy importante, pues se ubica en una región con una riqueza ecosistémica notable: las colindancias del Sitio Ramsar No. 1596 Laguna de Tamiahua, Área de influencia del Área de Protección de Flora y Fauna, Sistema Arrecifal Lobos–Tuxpan. Esta zona cuenta con un ecosistema diverso que incluye:

1. Bosques de manglar
2. Humedales
3. Presencia de numerosas aves migratorias

En estos humedales arbóreos se encuentran las cuatro especies de manglares reportadas en México, las cuales están bajo amenaza según la NOM-059-SEMARNAT-2010:

1. Mangle rojo (Rhizophora mangle)
2. Mangle blanco (Laguncularia racemosa)
3. Mangle negro (Avicennia germinans)
4. Mangle botoncillo (Conocarpus erectus)

Redoblan esfuerzos para proteger estos manglares en México

Sumado a este esfuerzo de conservación, han realizado talleres con los ejidatarios beneficiarios del PSA. La finalidad es que comprendan mejor la importancia de estas áreas para su comunidad y el uso potencial de uso del ecosistema de manglar y de su valor intrínseco. Ya se han llevado con éxito dos de cinco talleres programados, los cuales van en línea con la protección de los manglares en México. Entre los temas de los talleres están:

1. La importancia de los servicios ambientales o ecosistémicos
2. Relación del cambio climático y los servicios ambientales carbono azul
3. Las Unidades de Manejo ambiental y el aprovechamiento sostenible de los recursos naturales
4. Los servicios ambientales y el desarrollo comunitario
5. Las perspectivas a futuro de dichos humedales

Vigilan manglares con Drones

Otra de las medidas clave ha sido el mantenimiento de un cerco periférico que impide la entrada de ganado en las áreas protegidas. Esto asegura la conservación de la cobertura vegetal y evita las prácticas de ganadería tradicional que anteriormente prevalecían en la zona. La iniciativa protege el ecosistema y mejora la producción pesquera del área, proporcionando un ingreso alternativo sustentable para las familias ejidales con el aprovechamiento de especies como la jaiba, el robalo y los ostiones entre otras. 

Para sumar la efectividad de estas medidas, la Fundación realiza vuelos con drones, los cuales permiten:

1. Monitorear la ausencia de ganado en la zona protegida
2. Detectar conatos de incendio
3. Identificar áreas con tala ilegal y otros incidentes, garantizando así que la cobertura vegetal se mantenga en óptimas condiciones.

Al rescate de más manglares en México

Pero ésta no es la única vez que la fundación y la Conafor han trabajado en pro de los manglares en México. Desde 2012 llevan el proyecto de PSA denominado “Restauración comunitaria del ecosistema de manglar en la cuenca baja del río Tancochín y porción norte del Corredor Costero Tamiahua, Veracruz, México”, que cuenta con 2,779 hectáreas protegidas.

Estos esfuerzos continuos durante una década han sido fundamentales para la protección y la restauración de los manglares en la región.

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