México concluyó su participación en la 30ª Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP30) con avances sustantivos en adaptación, financiamiento, transición justa y cooperación técnica, fortaleciendo su papel en la acción climática global.
La delegación mexicana, encabezada por Alicia Bárcena, secretaria de Medio Ambiente y Recursos Naturales, presentó la Contribución Determinada a Nivel Nacional (NDC 3.0), que por primera vez incluye metas absolutas de reducción de emisiones hacia 2035, un componente específico de pérdidas y daños, así como un marco reforzado de adaptación y transición justa.
“La legitimidad nace de la escucha colectiva”, afirmó Bárcena, al destacar que la nueva NDC fue construida con la participación de comunidades, juventudes, sector productivo y pueblos indígenas.
Durante la conferencia, México, Guatemala y Belice lanzaron el Corredor Biocultural de la Gran Selva Maya, una iniciativa regional para proteger más de 5.6 millones de hectáreas, considerada una de las zonas de biodiversidad más relevantes del planeta.

El país también presentó los proyectos MEx30x30 y ACCIÓN, enfocados en cerrar la brecha financiera para cumplir las metas de conservación al 2030, con el respaldo del Fondo para el Medio Ambiente Mundial, el Fondo Verde para el Clima y el Fondo Mexicano para la Conservación de la Naturaleza. Estas acciones se fortalecen con el aumento aprobado al presupuesto de Áreas Naturales Protegidas en 2026.
Bárcena además fungió como cofacilitadora de las Consultas Ministeriales sobre Transición Justa, uno de los temas centrales de la COP30, destacando que esta transición “solo es posible si pone al centro a las personas, a los trabajadores y a las comunidades”.
La delegación mexicana participó en paneles técnicos sobre metano, adaptación, financiamiento climático y descarbonización, y sostuvo reuniones bilaterales con representantes de Colombia, Cuba y Reino Unido para fortalecer alianzas climáticas.
La COP30 concluyó con acuerdos globales clave, entre ellos:
- Triplicar el financiamiento para adaptación hacia 2035.
- Crear un nuevo mecanismo internacional de transición justa.
- Lanzar el Acelerador de Implementación Global para avanzar en las NDC.
- Un llamado a acelerar el abandono de combustibles fósiles bajo una transición ordenada, justa y equitativa.
Al cierre, Bárcena reafirmó el compromiso de México con el Acuerdo de París, el Acuerdo de Escazú y la justicia climática.
“Mantener vivo el 1.5 °C es una responsabilidad ética, ambiental y humana”, señaló.
El Gobierno de México continuará impulsando una agenda climática basada en la justicia social, la protección de la biodiversidad y soluciones basadas en la naturaleza para asegurar un futuro más seguro y sostenible para las comunidades.
