Precio de la gasolina terminaría con la liberalización de 2016
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Escrito por verdes |
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El pasado miércoles 12 de febrero, la presidenta Claudia Sheinbaum, durante su habitual conferencia de prensa, mencionó que su gobierno se encuentra en pláticas con empresarios gasolineros con el objetivo de fijar el precio de las gasolinas en 24 pesos por litro.
Con esta medida, afirmó la presidenta, se evitará que el precio del combustible aumente por arriba de la inflación y se contenga, la disparidad de precios entre estaciones de carga y entre una entidad y otra. “El acuerdo, dijo la mandataria, será voluntario”.
Bajo esta estrategia, está claro que se estaría volviendo al control de precios de gasolina para el usuario final, esquema que había sido destituido en 20216 en el marco de la reforma energética del ex presidente Enrique Peña Nieto.
Aquella medida, buscaba quitar el “monopolio” a Pemex como expendedor de gasolinas ya que dicho plan, además contemplaba la entrada al mercado de nuevas empresas y marcas para competir en la venta de combustibles al usuario final.
Con esta medida, se decía que los precios de las gasolinas serían más baratos y se obtendrían combustibles de mayor calidad. Fue así como los automovilistas vieron aparecer marcas como Shell, Gulf, Oxxo Gas , G500 y Chevron entre otras.
El plan además permitía que los “nuevos jugadores” pudieran importar de manera directa su propia gasolina de país y empresas que mejor precio ofreciera. De acuerdo con los ideólogos de ese plan, se auguraba una “competencia” sana que generaría un mercado competitivo con beneficios para el usuario final.
Hoy, casi ocho años después, los precios de las gasolinas en México no han disminuido, antes que eso, se han incrementando y ni el plan de Peña Nieto liberó totalmente el mercado, ni la política actual ha logrado hacer retroceder los precios de un combustible que es vital para la actividad económica en el planeta.
Así que, la iniciativa de fijación del precio de las gasolinas en 24 pesos por litro puede ser un paleativo contra la inflación pero también, es posible que vuelva a ser un pasivo del erario, pero ello dependerá, de que se reduzca a ún más la la importación de gasolinas a México.