Los retos y oportunidades para un turismo inclusivo y responsable

Viajar no está peleado con la conservación de la biodiversidad y la sostenibilidad, los retos y las oportunidades para lograr el turismo responsable.

La Organización Mundial de Turismo define el turismo sostenible como aquel que tiene plenamente en cuenta las repercusiones actuales y futuras, económicas, sociales y medioambientales para satisfacer las necesidades de los visitantes, de la industria, del entorno y de las comunidades anfitrionas.

Dicha organización señala tres fundamentos para conseguir un modelo sostenible, es decir, optimizar los recursos naturales, proteger la cultura local y el reparto equitativo de ganancias.

Para lograr estos objetivos, los proyectos deben proteger los ecosistemas y el entorno, pero además, todo ello combinado a una demanda responsable, para que los beneficios económicos estén en sintonía con unos productos y servicios que respeten los valores tradicionales y culturales de las personas locales.

El proyecto de Rusticae es un sello de calidad turística presente en Europa y América, donde el valor económico reside en lo local y moralmente responsable.

“El turismo se ha llegado a considerar la gran lacra del siglo XXI por el impacto tan nefasto que ha tenido en tantísimos lugares del planeta. Desde Rusticae siempre hemos apostado por un modelo de calidad versus cantidad”, dijo Carlota Mateos, Cofundadora de Rusticae.

“Un modelo que ha puesto en valor los territorios tan y como siempre fueron, que se apoya en el paisaje, en la cultura y la arquitectura regional, en una naturaleza bien preservada, y que siempre se construye en torno a las comunidades locales. En estos 26 años se ha revelado como un modelo tremendamente variable y con un fuerte impacto positivo, tanto social como medioambiental”, agregó Carlota Mateos.

Garantizar el turismo incluye un equilibrio entre las ganancias que se generan entre las personas que se dedican a este sector y los habitantes de los destino. Una manera de lograrlo es generando empleos dignos, acceso a vivienda a los trabajadores, invirtiendo en servicios sanitarios y en educación.

“El turismo de la sociedad poscovid es un derecho de la sociedad del bienestar, pero la visión del cliente es más exigente con el producto que quiere consumir y ha servido para sensibilizarnos con el impacto que dejamos”, comentó Macu Armisén, consejera de ECODES y directora gerente de Zaragoza Turismo hasta 2020.

De acuerdo con el informe sobre Viajes Sostenibles de 2021, realizado por Booking, los clientes están más comprometidos que nunca con viajar de forma consciente, 60 por ciento admite que le molesta que el alojamiento elegido le impida ser sostenible, mientras que 49 por ciento cree que no había suficientes opciones de viajes sostenibles disponibles hasta 2021.

Entre los beneficios para reducir el impacto de la huella ambiental de los destinos llegarían con la mejora de la movilidad sostenible, la renaturalización, eventos culturales sostenibles y el uso de productos y recursos locales.