La crisis energética puede fracturar la unión en Europa 

Fatih Birol, jefe de la Agencia Internacional de la Energía (AIE), advirtió a los países europeos sobre los riesgos de una lucha por la seguridad energética durante el invierno que se avecina, lo cual amenaza con romper la unidad de la Unión Europea al provocar revueltas sociales.

El directivo ejecutivo de la AIE, aseguró que temía un escenario del salvaje oeste, si los países europeos restringieran su propio comercio o dejaran de colaborar con sus vecinos en medio de la creciente ansiedad por la falta de combustible durante el siguiente invierno.

La Agencia Internacional de la Energía es una organización financiada principalmente por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).

Entrevistado el jueves pasado durante el Foro de Acción Global de Energía Limpia, llevado a cabo en Pittsburgh, Pensilvania, aseguró:“Las implicaciones serán muy malas para la energía y para la economía, pero extremadamente malas políticamente. Si Europa falla en esta prueba, puede ir más allá de las implicaciones energéticas.”

Los países europeos han persistido en no mantener un frente unido en medio de los disparados precios de la energía, que han llevado al continente al borde de una recesión económica. Es importante destacar que la creciente crisis ha generado temores con relación a que algunos países puedan cerrar acuerdos paralelos para el suministro ruso o restringir las exportaciones de energías a sus vecinos.

Birol señaló dos escenarios “La UE y los miembros trabajarán en solidaridad apoyándose mutuamente o, en otro escenario, que cada país vea para sí mismo.” Agregó que uno de los valores fundamentales de la UE es la solidaridad y si no toman las mejores decisiones se afectará a todo el mundo.

También advirtió contra la complacencia europea después de que varios países del continente lograrán acumular reservas de gas natural antes de entrar el invierno, cuando la demanda alcanza su punto máximo. 

Incluso si el continente tratará de evitar una situación negativa sorpresiva, como un invierno más frío de los esperado, aún así, Europa sufrirá en los próximos meses, considerando la recesión económica y daños significativos a los presupuestos domésticos.

La situación europea

El mes pasado los países vecinos de Noruega criticaron al gobierno de Oslo, por su comportamiento egoísta, al considerar detener las exportaciones de electricidad mientras acumulaban depósitos hidroeléctricos. 

El secretario de Estado del Ministerio de Petróleo y Energía de Noruega, Andreas Bjelland Eriksen, negó ante el Financial Times que el país detuviera las exportaciones, lo único que se hizo fue priorizar el llenado de los depósitos por la misma razón que Europa está almacenando gas.

Para Birol la crisis en Europa podría durar hasta mediados del 2023, debido al estancamiento del suministro mundial y la probabilidad de una mayor competencia por el gas natural licuado de una China en recuperación y otros  importadores.