Los vuelos frecuentes podrían salir más caros en Europa

Una coalición de organizaciones de la Unión Europea y el Reino Unido presentaron una propuesta para imponer una Tasa a los Vuelos Frecuentes (TVF). De este modo pretenden mitigar los crecientes impactos sociales, económicos y ambientales del transporte aéreo en Europa, informó Ecologistas en Acción.

La TVF aplica una tasa creciente a cada viaje de ida y vuelta (I/V) comprado de manera sucesiva por una persona durante un periodo determinado. Así, el primer billete de I/V estaría libre de cargas. Pero a partir del segundo se iría aplicando una tasa creciente, Ésta iría acompañada de recargos adicionales para vuelos de larga distancia y determinadas clases como primera y business.

Esta medica podría conseguir una recaudación anual de 74,100 millones de euros en el Espacio Económico Europeo. Es decir: UE 27 + Noruega, Islandia y Liechtenstein) y Reino Unido.

La propuesta, que en España ha sido presentada por Ecologistas en Acción, viene motivada por dos hechos fundamentales.

1. El preocupante incremento de las emisiones del sector. En efecto, mientras otros sectores económicos han reducido sus emisiones en la UE, la aviación las aumentó un 30 % entre 2013 y 2019. Esto, como resultado del aumento exponencial del tráfico aéreo. Según Eurocontrol, se prevé un crecimiento adicional del sector hasta 2030 de entre el 2,4 % y el 3,7 % anual.
2. Las entidades promotoras denuncian la situación de privilegio fiscal de la que se beneficia el transporte aéreo. Esto sitúa a esta industria en una situación de ventaja frente a otros medios de transporte con menor impacto. La exención del pago de impuestos al combustible de aviación en la UE, así como la inexistencia de un IVA para billetes internacionales son algunos ejemplos de un agujero fiscal que en 2022 costó 34.220 millones de euros a la Unión Europea (4.610 a España).

Las organizaciones europeas defienden la Tasa a los Vuelos Frecuentes como una propuesta con un marcado carácter social. Esto, en la medida en que está dirigida a gravar el uso intensivo del avión como medio de transporte. Desde su punto de vista, esta práctica casi es exclusiva de los grupos sociales con mayores ingresos.

Al mismo tiempo, la propuesta protege el uso del avión para viajeros ocasionales y grupos socioeconómicamente menos favorecidos. Basta ver los datos del estudio “Europe talks flying”. Sus datos indican que en Europa occidental el 70 % de los hogares con menos ingresos (< 23.000 €/anuales) no toma ningún vuelo al cabo del año. España, tan solo el 4,8 % de la población vuela más de tres veces al año.

¿Los beneficios de la Tasa a los Vuelos Frecuentes?

La propuesta de Tasa a los Vuelos Frecuentes establece un cobro inicial de 50 euros a partir del segundo vuelo de ida y vuelta adquirido en un año.

1. Este precio que se va incrementando progresivamente en vuelos sucesivos.
2. Igualmente, contemplan recargos de entre 50 y 100 euros en función de la distancia y la clase.

Las organizaciones destacan que la implementación a escala europea de la TVF podría generar una reducción del 21 % de las emisiones de CO₂ del transporte aéreo. Esto, como consecuencia de una reducción del número de pasajeros en un 26 %.

Un estudio realizado con la firma especializada AdaStone Law confirma que la adopción de la TVF es legalmente posible. Esto, tanto a escala de toda la UE como de sus Estados miembro o de una coalición de estos.

“Resultan social y económicamente inaceptables los privilegios fiscales de los que todavía sigue beneficiándose el sector de la aviación”, dijo Pablo Muñoz Nieto. Él es coordinador del área de movilidad sostenible de Ecologistas en Acción.

Dice que necesitamos herramientas que ayuden a frenar los crecientes impactos de este modo de transporte altamente contaminante. Y agregó que es fundamentalmente utilizado por una minoría de personas adineradas.

“La Tasa a los Vuelos Frecuentes representa una fórmula equilibrada para reducir las emisiones y generar ingresos susceptibles de apoyar una transición a modelos de transporte más sostenibles”, agregó.

Todo ello, desde una perspectiva de justicia social que protege los derechos de las personas que solo vuelan ocasionalmente.

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