Las ciudades que merecemos

Por: Griscelda Ramos, Directora de sustentabilidad de Natura

Durante mucho tiempo hemos visto películas futuristas en las que se muestran imágenes de urbes perfectamente planeadas que funcionan gracias a la energía solar, en ellas, podemos observar vehículos eficientes y el uso de inteligencia artificial.  Este tipo de ciudades fueron por mucho tiempo el ideal de vida al que deberíamos aspirar, las llamadas “ciudades sostenibles” eran el futuro, pero hoy son una realidad.

Una ciudad sostenible se define por su capacidad de resiliencia a los impactos del calentamiento global, busca reducir las condiciones de vulnerabilidad de su población y aumentar su capacidad adaptativa. También pretende garantizar oportunidades igualitarias para sus habitantes en los rubros de educación, sistemas de salud, seguridad, transporte público accesible, gestión de desechos y una adecuada calidad ambiental, generando con esto altos niveles de satisfacción en las comunidades. 

Un ejemplo de esto es Oslo, la capital noruega cuyo gobierno se ha tomado su tiempo para implementar un proyecto de reestructuración de tejido urbano para desarrollar una urbe ecológica, innovadora y con una actividad cultural en ebullición. Para ello, el transporte es una de las principales herramientas para reducir las emisiones de CO2, y hoy es considerada el corazón mundial del uso de vehículos eléctricos y su transporte público funciona con biogás, mismo que es generado a partir de residuos orgánicos. 

Un punto medular en el éxito de las ciudades sostenibles es que tanto empresas como hogares y ciudadanos, implementan criterios de sostenibilidad y principios de economía circular como reducir, reciclar y reutilizar.

En Natura, empresa Carbono Neutral desde 2007, queremos continuar como actores activos en el proceso de construcción de ciudades sostenibles, por eso, desde hace años hemos decidido abrazar la circularidad y la regeneración. Estamos enfocados en lograr la plena circularidad del embalaje y tener al menos un 95 por ciento de ingredientes renovables o de origen natural para la marca Natura y al menos un 95 por ciento de fórmulas biodegradables.

De igual forma asumimos la responsabilidad por la correcta disposición de todos nuestros residuos de envases habilitando sistemas de recolección donde no existe una infraestructura de reciclaje adecuada.

Apostamos por la agricultura regenerativa en áreas deforestadas para reducir el uso de productos químicos y crear alternativas a los monocultivos; además buscamos actuar en asociación para crear consciencia y desarrollar capacidades y soluciones regenerativas que transformen los sistemas y generen un impacto ambiental y social positivo, permitiendo que todos prosperen.

Y Asegurar que el cien por ciento del volumen, de al menos dos de los principales commodities de nuestro negocio, se produzcan con prácticas regenerativas.

Contamos con una amplia oferta de repuestos de productos, evitando con esto los plásticos de un solo uso que tanto han afectado a los mares, así como la inclusión de material reciclado en los envases.

No se trata solo de la ficción de una ciudad perfecta. Cada uno de nosotros, en nuestro rol de ciudadanos y con nuestras decisiones, podemos ser parte del cambio y ayudar a crear los hogares que queremos con una actitud y un consumo responsable, y por supuesto, en equilibrio con la tierra.